El último reducto del Castillo de Montjuïc que tenía el Ejército se abrirá al público por La Mercè
Son cinco hectáreas desde donde los visitantes tendrán vistas inéditas del Puerto, del Delta del Llobregat y del área metropolitana
El Ayuntamiento de Barcelona mostrará por las fiestas de La Mercè, que se celebran a finales de septiembre, las cinco hectáreas del Castillo de Montjuïc que ocupaba hasta hace pocos días un batallón del Ejército. Se trata de cinco hectáreas donde hay siete edificios de planta baja, otro de servicios, unos garajes y media decena de polvorines, que serán derrumbados. Desde allí los visitantes tendrán vistas inéditas del Puerto, del Delta del Llobregat y del área metropolitana.
La zona que se mostrará representan casi la mitad de las 11 de la fortaleza, y por ahora se abrirán sólo por La Mercè, cuando en el castillo se ofrece circo. Además, se podrían trasladar provisionalmente los cursos sobre paz que se imparten en el edificio principal, cuyo tejado será reformado.
El batallón era el último reducto que faltaba para cumplir la orden ministerial del 27 de abril de 2007 de cesión del castillo a la ciudad. Pese a que ya se celebran los cursos, el Consorcio por la Paz que sustituye al Museu Militar está encallado porque la Generalitat rechaza que el Gobierno esté representado por el Ministerio de Defensa.
En los últimos meses los servicios municipales ya se encargaban del mantenimiento del recinto, y el viernes el Ayuntamiento recibió decenas de llaves. La semana anterior, los militares hicieron su propia despedida con una barbacoa. En los mejores tiempos la fortaleza albergó a un centenar de efectivos.
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