Jamal Zougam se desliga del 11-M en el macrojuicio contra la célula española de Al Qaeda
El imputado por los atentados de Atocha asegura que su única relación con Abu Dadah era "comercial"
Jamal Zougam, uno de los presuntos autores materiales de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, se ha declarado hoy "inocente" de la masacre de Atocha durante su declaración, en calidad de testigo, en el macrojuicio que desde el pasado 22 de abril celebra la Audiencia Nacional en la Casa de Campo de Madrid contra 24 acusados de integrar la supuesta célula española de Al Qaeda, según ha informado la cadena SER.
Esta auto-exculpación ya la había realizado Zougam ante el juez de la Audiencia Nacional, Juan del Olmo, a quien negó cualquier participación en los hechos que se les imputan y aseguró que cuando se produjo el atentado se encontraban durmiendo en sus domicilios. Zougam, considerado presunto autor material de los atentados, respondió a las preguntas del juez Del Olmo sin levantar la vista del suelo y terminó llorando ante el magistrado, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Jesús Santos, y su abogado de oficio.
Sin embargo, en esta ocación el magistrado no le ha dejado continuar en su testimonio, al no ser esta la materia de juicio. El interrogatorio ha continuado con las preguntas del fiscal Pedro Rubira, centradas en sus vínculos con el principal procesado en este juicio, Imad Eddin Barakat Yarkas, Abu Dahdah, para quien pide 62.512 años de prisión. Sobre éste, Zougam ha afirmado que su única relación era "comercial", ya que Abu Dadah le venía género para la tienda que regentaba en el barrio madrileño de Lavapiés.
Nada que ver con la 'yihad'
Zougam ha explicado que le conocía por este apelativo y que no supo cuáles eran sus apellidos hasta que aquél ingresó en prisión, en noviembre de 2001, y su nombre apareció en la prensa. Añadió que inició una relación comercial con él "meses antes" de que lo detuvieran y explicó que era una persona conocida entre los comerciantes de Lavapiés.
El testigo, que nació en Tánger (Marruecos) y que tras la separación de sus padres vino a España, indicó que siempre ha trabajado donde ha podido, tanto en la construcción, como en restaurantes y últimamente en comercios. Sobre el registro que efectuó la Policía en su casa en 2001, Zougam dijo que sólo se llevaron unas 30 ó 40 cintas de vídeo de "películas o conciertos", pero ninguna con escenas de la yihad islámica.
Finalmente, Zougam, que no fue interrogado por ninguna de las defensas, señaló al fiscal que al otro procesado que conoce es Said Chedadi porque también regentaba un comercio en Lavapiés. Antes de marcharse de la Sala, el testigo puso de manifiesto que le tratan "muy mal en la cárcel", a pesar de que el presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez, le advirtió de que venía como testigo y que se tenía que limitar a contestar las preguntas.
Extradición de Farid Hilali desde Reino Unido
Un juez británico ha autorizado hoy la extradición a España del marroquí Farid Hilali, requerido en relación con los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos. La solicitud de extradición se basa en una sospecha de que Hilali, de 35 años, telefoneó a Imad Eddin Barakat Yarkas, de origen sirio y considerado cerebro de la célula de Al Qaeda en Madrid, semanas antes de los atentados del 11-S. La policía británica detuvo al presunto terrorista en junio de 2004, tras recibir la orden europea de arresto tramitada por España.
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