La AVT rompe sus relaciones con el alto comisionado de apoyo a las víctimas
Su portavoz asegura que Peces-Barba "no es un intermediario apropiado" por sus "mentiras y calumnias" y "comprensión hacia el entorno etarra"
La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) ha pedido hoy formalmente al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la dimisión del alto comisionado de Apoyo para las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces-Barba. La negativa del presidente del Ejecutivo a aceptar la renuncia de éste ha provocado que el colectivo haya anunciado la ruptura de relaciones con la institución creada por decisión de Zapatero mientras el rector de la Universidad Carlos III siga ocupando el puesto.
Así lo ha manifestado en rueda de prensa el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, tras reunirse en el Palacio de la Moncloa con Zapatero, quien le ha trasladado su completa confianza en el trabajo que desarrolla Peces-Barba a favor de las víctimas del terrorismo.
La AVT basa su decisión en las, a su juicio, "injurias y calumnias" vertidas por el alto comisionado contra este colectivo. Además, lamenta la ausencia de Peces-Barba en la manifestación de apoyo a las víctimas del pasado 22 de enero, en cuyo desarrollo se profirieron insultos contra el ministro de Defensa, José Bono, y abucheos a Peces-Barba.
Alcaraz ha subrayado que el alto comisionado no goza de la confianza de la Asociación y ha perdido credibilidad debido a que, según ha explicado, negó una conversación mantenida con la AVT en la que les planteó que abrieran un foro de debate para dar amnistía a los presos de ETA sin delitos de sangre. Para Alcaraz, "un señor que miente, no puede representar a un colectivo tan digno". En este sentido, ha recordado la cascada de peticiones de dimisión de Peces-Barba de centenares de socios de la AVT, amenazando algunos de ellos con darse de baja en la Asociación si no se exigía su cese.
"Comprensión hacia el entorno etarra"
"Para nosotros, carece de legitimidad y ha lanzado calumnias y mentiras que solo demuestran que no es el intermediario apropiado ni goza de la confianza de las víctimas", ha remarcado. En este contexto, ha criticado la decisión del alto comisionado de no acudir a manifestaciones "hasta que no hubiera un atentado con víctimas mortales" y el hecho de que manifieste "tanta comprensión hacia todo el entorno etarra".
No obstante, Alcaraz ha dejado claro que la Asociación mantendrá sus vínculos con el Gobierno a través del Ministerio de Interior y su Oficina de Atención a las Víctimas del Terrorismo, con los que, ha dicho, mantiene "una relación extraordinaria" y son los que "han demostrado ser realmente eficaces y conocer la problemática del terrorismo".
Preguntado por la comparecencia de Peces-Barba en el Congreso la semana pasada -en la que reclamó la ayuda de las asociaciones de víctimas para "desvincular sus objetivos de los fines partidistas para que no sean utilizados por nadie"-, el presidente de la AVT ha negado que el alto comisionado saliera "fortalecido" tras sólo reclamar su dimisión el PP. "A mí no me gustaría salir fortalecido de una Comisión donde me apoye el PNV y ERC, los amigos de ETA y cómplices de muchísimas actividades de la banda terrorista; jamás querría su apoyo, ni su aplauso", ha concluido.
Creada en 1981, la AVT es la mayor y más veterana asociación de afectados por el terrorismo en España, con unos 6.000 socios, sobre todo víctimas de ETA pero también de otros grupos como los GRAPO, y algunos pocos que sufrieron los atentados del 11-M. Al crearse la institución del comisionado para las víctimas, la AVT coincidió con el Partido Popular en criticar que el Gobierno no hubiera "consensuado" su nombramiento, aunque Alcaraz se mostró dispuesto a dar "un margen de confianza" a Peces-Barba. Ese margen se ha extinguido hoy.
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