Un 'ertzaina', herido leve en la explosión de un coche bomba de ETA en Getxo

Un coche bomba ha hecho explosión a las 14.30 en la localidad vizcaína de Getxo 15 minutos después de que un comunicante avisara al diario Gara, en nombre de ETA, de la colocación del artefacto. El aviso ha llegado demasiado tarde y el estallido se ha producido mientras se acordonaba la zona. Un ertzaina que participaba en el operativo ha resultado herido leve.

El vehículo, un Peugeot 306, se encontraba aparcado en la esquina de la calle Ondategi con Santiago Zabala, en el barrio de bilbaíno de Neguri, una calle paralela a Manuel Smith, donde el comunicante dijo que iba a estallar la bomba. El coche había sido robado horas antes en el monte de Artxanda por varios miembros de la banda terrorista que amenazaron a su propietario y lo dejaron atado a un árbol en zona conocida como El Vivero. El agente, de 45 años, sufre heridas leves en la cara y en una pierna a causa de la metralla y ha sido trasladado por sus propios compañeros al hospital de Tres Cruces de Bilbao, donde continúa ingresado.

La explosión ha causado también un gran socavón en el asfalto, así como daños considerables en los coches de las inmediaciones y desperfectos en las viviendas colindantes. Estas últimas presentan sobre todo cristales rotos y roturas en las fachadas. Una de las ruedas del coche bomba penetró por la ventana de una casa hasta el salón de la vivienda, sin llegar a herir a ninguna persona.

40 kilos de explosivos

El consejero vasco de Interior, Javier Balza, ha dicho, en su visita al lugar de la explosión, que el vehículo podría haber sido cargado con 40 kilos de explosivos, si bien ha aclarado que aún tiene que ratificarlo la Unidad de Explosivos. Balza ha calificado el atentado de "indiscriminado", pues el aviso no se ha recibido con suficiente antelación como para acordonar la zona.

Rumores de tregua

El atentado llega tres días después de que ETA hiciera público un comunicado en el que avalaba la oferta que Batasuna hizo el pasado 14 de noviembre en el Velódromo Anoeta de San Sebastián. En ella, Batasuna proponía para solucionar el "conflicto vasco" un doble diálogo entre el Gobierno central y ETA, por un lado, y entre todos los partidos vascos, incluido Batasuna, por otro. El Gobierno reaccionó instando a la banda a emitir un nuevo comunicado anunciando la entrega de las armas y su disolución, lo que ha desencadenado rumores acerca de una inminnete tregua de la organización terrorista. También el pasado viernes, un día después de la reunión entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, para pactar una estrategia común para responder al desafío que representa el denominado plan Ibarretxe, Arnaldo Otegi, lider de la coalición abertzale ilegalizada, emplazada a Zapatero en una carta abierta a buscar "la desmilitarización multilateral". Sin embargo, el propio Otegi ha aclarado esta misma mañana que no estábamos "de momento" en un proceso de paz.

Getxo, objetivo de los terroristas

Getxo es una localidad en la que residen empresarios, jueces y otros destacados profesionales de la sociedad vasca, lo que ETA denomina despectivamente "la burguesía y oligarquía vasca". El municipio ha sido escenario de la explosión de varios coches bomba como amenaza a los empresarios que viven en la zona, con el objetivo de recordarles su obligación de cumplir con el denominado impuesto revolucionario, el método de extorsión empleado por la banda.

El último coche bomba, que no explotó, fue colocado por los terroristas el pasado 1 de julio de 2003. El coche, cargado con más de 15 kilos de dinamita titadyne, que fue aparcado junto a un complejo de edificios de la empresa Iberdrola en las afueras de Bilbao, tenía como destinatarios a los artificieros de la Ertzaintza. Poco meses después, el 7 de noviembre de 2001 ETA asesinó a tiros en la localidad al magistrado de la Audiencia de Bilbao y profesor universitario José María Lidón Corbi, de 50 años.

La calle Manuel Smith, muy próxima al lugar de la explosión de hoy, fue escenario de otro atentado similar el 25 de junio de 2000. Un coche bomba saltó por los aires después de que un comunicante anónimo avisara con unos minutos de antelación de la inminencia del atentado. El vehículo, estacionado delante del chalet de un miembro de la familia Delclaux, causó importantes daños en varias viviendas e inmuebles de la zona, así como heridas leves a cinco personas.

El mes pasado ETA colocó bombas de baja intensidad en varias localidades españolas, que explotaron sin causar heridos graves. Esta es la primera vez desde los atentados del 11 de marzo y desde que se constituyó el nuevo Gobierno que la banda terrorista utiliza una cantidad importante de explosivos en una acción terrorista.