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Historia y Evolución de ETA (II)

El asesinato de Miguel Ángel Blanco y el 'Espíritu de Ermua'

En julio de 1997 ETA secuestra al concejal del PP en Ermua Miguel Ángel Blanco. La organización pide, a cambio de su liberación, que los 460 de miembros que se encontraban en cárceles dispersas por España vuelvan al País Vasco. Al no aceptarse la petición y vencido el plazo, con todo el país pendiente, el concejal es asesinado de dos tiros en la cabeza. Este acto a sangre fría provoca que millones de personas se lancen a la calle en protesta haciendo nacer el llamado "Espíritu de Ermua". Desde este momento la presión policial y judicial se acentúa aún más. Francia detiene a 50 etarras. Este mismo año la justicia procesa a la Mesa Nacional de HB y Garzón cierra el diario abertzale

La tregua

El 16 de septiembre de 1998, tras pactar con el nacionalismo vasco moderado, ETA anuncia una tregua indefinida y sin condiciones, que termina en 14 meses, cuando el gobierno del Partido Popular se niega a negociar sobre la futura independencia del País Vasco. - Herri Batasuna cambia de nombre para presentarse a las elecciones del 25 de octubre de 1998, pasa a llamarse Euskal Herritarrok. -Francia detiene a Javier Arizkuren «Kantauri», lo que facilita el acceso a la dirección de ETA de García Gaztelu y de otros terroristas que se habían opuesto a la tregua desde un principio En noviembre de 1999, el presidente del Gobierno, José María Aznar, informa al Rey de que el grupo terrorista había puesto fín a la tregua.

Prosiguen los asesinatos

En 2000 se reanudan los asesinatos. Sólo en este año se producen 23, entre ellos el fundador del Foro de Ermua, José Luis López de Lacalle, el Magistrado del Tribunal Supremo, José Francisco Querol Lombardero, y el Fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia, Luis Portero García.- ETA pone en su punto de mira prioritario a periodistas y medios de comunicación. Sufren intentos de atentado:

Ofensiva policial y judicial

La oleada de atentados provoca que se intensifique la respuesta de las fuerzas de seguridad. Se produce la detención de Iñaki de Rentería, considerado por las Fuerzas de Seguridad el máximo dirigente militar de ETA y se intensifica la lucha antiterrorista en colaboración con Francia. La policía de este país detiene a 15 personas, siete de ellas dirigentes etarras.- El Supremo ordena la excarcelación del ex número uno de ETA, Josu Ternera.-La audiencia Nacional condena al general Enrique Rodríguez Galindo, al ex gobernador civil de Guipúzcoa Julen Elgorriaga, al teniente coronel Ángel Vaquero y a los ex guardias civiles Enrique Dorado y Felipe Bayo a penas que oscilan entre 67 y 71 años de cárcel, por considerarles autores del secuestro en Francia - en octubre de 1983- y posterior asesinato de los miembros de ETA José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala.- En septiembre de 2001, la policía francesa detiene a Asier Oiartzabal Txapartegi, Baltza, considerado el responsable del aparato logístico de la organización.

Ilegalización de Batasuna

En agosto de 2002 Garzón inicia los trámites para suspender provisionalmente las actividades de Batasuna y cerrar sus sedes, al tiempo que el Congreso y la Fiscalía General del Estado piden al Tribunal Supremo que ilegalice al partido, por considerarlo el brazo político de ETA. El 28 de marzo de 2003 el Supremo dicta la sentencia que ilegaliza a Batasuna, Euskal Herritarrok y HB y ordena el cese inmediato de sus actividades.

Tregua en Cataluña

A comienzos de 2004 Joseph Lluís Carod-Rovira (ERC), socio del PSC en el Gobierno catalán, revoluciona el panorama político tras conocerse que ha mantenido conversaciones con miembros de la cúpula de ETA para negociar una tregua para Cataluña. La organización terrorista confirma este pacto el 18 de febrero de 2004, a un mes escaso de las elecciones generales. -A principios de octubre de 2004 la policía francesa y la Guardia Civil detiene a 20 personas relacionadas con el aparato logístico de ETA en Francia. Entre los arrestados está el máximo dirigente de la organización terrorista Mikel Antza.

Un año contra las cuerdas

Durante 2004, la sociedad española ha visto por primera vez a ETA contra las cuerdas por la presión política y judicial desplegada en España y Francia de forma coordinada. En total han sido detenidos 131 activistas y colaboradores, lo que ha reducido al mínimo su estructura operativa para matar y amedrentar. La organización terrorista no ha cometido ningún atentado mortal desde el 30 de mayo de 2003, cuando mató con una bomba lapa a dos policías en Sangüesa (Navarra). En 2004 cometió 22 atentados, sobre todo con artefactos explosivos de baja potencia, en verano en el Puente de la Constitución, y contra intereses turísticos o estratégicos, acciones que los expertos consideran actos de propaganda destinados a causar el máximo ruido con el menor coste.

La policía descabeza ETA

En 2004 fueron detenidos 74 militantes y colaboradores en España y otros 57 en Francia, un cifra sólo superada por los 135 de 2001. La policía francesa ha capturado al máximo dirigente de la organización, Mikel Albizu,

Ofertas de paz y bombas

El 14 de noviembre, Batasuna celebró en el velódromo de Anoeta (San Sebastián) un acto político consentido por las autoridades; su portavoz, Arnaldo Otegi, presentó una nueva línea política con una apuesta "por la paz" y "por la utilización de vías exclusivamente políticas y democráticas" para resolver "el conflicto vasco". Batasuna proponía un doble diálogo entre el Gobierno central y ETA, por un lado, y entre todos los partidos vascos, incluido Batasuna, por otro. Apenas unas horas después, ETA hacía colocaba dos potentes bombas en el refugio militar de Belagua, en el Pirineo de Navarra. Tres semanas después hacía estallar cinco bombas en gasolineras del extrarradio de Madrid, que colapsaron los accesos a la capital en el día de inicio del Puente de la Constitución. Tres días después, el día en el que se celebra el aniversario de la aprobación en referendo de la Ley Fundamental, la organización terrorista colocaba siete artefactos de escasa potencia que los terroristas en Ávila, Valladolid, León, Santillana del Mar, Málaga, Ciudad Real y Alicante. Una decena de personas resultaron heridas leves. Batasuna no condenó los atentados.

El primer coche bomba tras el 11-M

El 15 de enero de 2005 el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reclamaba a ETA el cese de la violencia para "escuchar" a Batasuna. "Sólo esperamos una carta de ETA en la que nos diga dónde y cuándo entrega las armas y abandona el terrorismo", añadía un día después el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla. Entre medias, de madrugada, ETA hacía público un comunicado en el que ratificaba la oferta presentada por Batasuna el 14 de noviembre. El Ejecutivo afirmaba estar a la espera de un nuevo comunicado que anunciara el cese del terrorismo. El 18 de enero ETA hacía estallar un coche bomba en el municipio vizcaíno de Getxo, hiriendo a una

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