La primera 'niña-probeta' cumple 25 años
Con Louise Brown comenzó la técnica de fecundación 'in vitro', esperanza para muchas parejas con problemas para tener hijos
La primera niña probeta cumple hoy 25 años. El 25 de julio de 1978 nació en Manchester Louise Brown, convirtiéndose en el primer bebe-probeta de la historia. Ella se considera una chica normal, pero su nacimiento fue uno de los avances más importantes en técnicas de reproducción. Y el comienzo de un buen número de conflictos éticos y legales.
La celebración del cumpleaños de Louise Brown tendrá lugar este sábado en la clínica Bourn Hall de Cambridge (sur de Inglaterra), fundada en 1980 por el equipo de médicos que permitió el nacimiento de Louise Brown. Uno de los doctores pioneros de la fertilización in vitro, el profesor Robert Edwards, fisiólogo de la Universidad de Cambridge, estará en la fiesta junto a Louise y su prometido, Wesley Mullinder, de 33 años. Se espera que a la cita acudan más de 3.000 invitados, entre ellos mil niños y jóvenes que nacieron gracias a este sistema de fecundación.
Esta expectación se repite en los cumpleaños de Louise desde que nació, especialmente en los más significativos: cuando cumplió un año, cinco, diez, veinte... Todo por haber sido engendrada en un tubo de ensayo en lugar de la matriz de su madre. Un óvulo de su madre fue fecundado con esperma de su padre en un laboratorio, después volvió a colocarse en el útero materno, y partir de entonces se produjo un embarazo normal. Louise y la técnica que permitió su nacimiento, despertaron entonces muchísima expectación.
La técnica de fecundación in vitro, que ha ayudado a muchas parejas que de otra forma serían incapaces de tener hijos, ha evolucionado mucho en estos 25 años. En la actualidad garantiza un 75% de éxito. Allan Templeton, profesor honorífico del Colegio Real de Tocólogos y Ginecólogos de Londres, dijo hoy a EFE que "en estos momentos los médicos pueden cambiar realmente la vida de las personas". Si el problema es la falta de ovulación, o de espermatozoides, éstos pueden obtenerse de donantes. Contra el riesgo de enfermedades hereditarias es posible hacer un diagnóstico genético y elegir sólo los embriones sanos. En caso de que el padre sea portador del virus del sida se puede hacer un 'lavado' del semen para que ni el bebé ni la madre corran riesgo de contagio. La concepción de Louise "fue uno de los momentos más importantes para la ciencia de todo el siglo XX", según Templeton.
Louise, que trabaja como cartera en Bristol (suroeste de Inglaterra), comentó cuando cumplió 20 años, que de pequeña se sentía "especial" por la forma en que fue concebida. "Cuando tenía diez años solía pensar en ello, pero ahora, después de que tantos niños hayan nacido de la misma forma, ya no", afirmó entonces. Louise fue llamada Baby Miracle, 'niña milagro'. Antes de llegar a su casa desde el hospital ya había recibido cientos de regalos y tarjetas de felicitación, la atención de los periodistas de todo el mundo, y hasta una proposición de matrimonio. Para su madre y para el mundo fue un milagro, pero cada vez que le preguntan Louise insiste en que es una solamente una chica normal.
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