Los dos etarras detenidos ayer en Francia eran encargados de la captación

Fuentes de la lucha antiterrorista han informado esta mañana de que los dos presuntos etarras que fueron detenidos en la localidad de Agen (suroeste de Francia) son Fernando Bert Arraechea y Antonio Agustín Figal Arranz. Dichas fuentes consideran que eran miembros del aparato de ETA dedicado a la captación y formación de nuevos etarras.

Bert Arraechea, de 32 años, y Figal Arranz, de 30, son conocidos por las fuerzas de la lucha antiterrorista española y suelen actuar juntos, según las fuentes. Los dos hombres, que "han reconocido su pertenencia a ETA", se encuentran en las dependencias del Servicio Regional de la Policía Judicial (SRPJ) de Toulouse. En el momento de la detención, cada uno llevaba una pistola y tenían abundante documentación sobre presos de la organización terrorista.

Fernando Bert, nacido en Oiartzun (Guipúzcoa), está acusado en España de haber sido colaborador del comando Donosti-Bakartzo, desarticulado por la Guardia Civil el pasado mes de marzo, poco después del asesinato del concejal socialista de Orio Juan Priede. Además, se le considera miembro del aparato de captación de ETA desde que logró darse a la fuga después de que los agentes lograr capturar a los dos liberados (a sueldo) de este comando, Unai Bilbao Solaetxe e Ignacio Bilbao Goikoetxea. Desde entonces se desconocía su paradero.

Figal, ex dirigente de las Gestoras Pro Amnistía, está acusado en Francia de haber sido el autor de los disparos que hirieron gravemente a un gendarme el 28 de noviembre del pasado año cerca de Pau. Además, se encuentra incluido en la lista de terroristas buscados de la Unión Europea (UE). La policía española consideraba que actualmente era uno de los responsables del aparato de cursillos de ETA que se encarga de proporcionar adiestramiento a los miembros de la organización terrorista.

Los miembros del último comando Donosti desmantelado por la Guardia Civil el pasado mes de septiembre habían asistido aun cursillo impartido, presuntamente, por Figal. Vecino de Santurce, fue militante de Jarrai y posteriormente actuó como coordinador de las Gestoras de Vizcaya durante los años 1998 y 1999, al tiempo que formó parte de Senideak, la asociación de familiares de miembros de ETA. Como dirigente de estos organismos es una persona conocida que intervino públicamente en numerosas ruedas de prensa. Según fuentes policiales, había huido de su domicilio en julio del pasado año.

Acusado de coacciones

Según informó la policía francesa, Figal, en compañía del también miembro de ETA Ibón Fernández Iradi, Susper, fue interceptado el 28 de noviembre del pasado año por una patrulla de la Gendarmería en la localidad de Monein, cercana de Pau. Los dos individuos abrieron fuego contra los agentes hiriendo de gravedad a uno de ellos, Gerard Laroude, que recibió numerosos impactos. Antes de disparar contra los gendarmes, el ex dirigente de las Gestoras había entregado su DNI a los funcionarios, lo que permitió su identificación.

Además, el ex dirigente de las Gestoras estaba acusado de un delito de coacciones a la que fuera portavoz del PP en el ayuntamiento de Bilbao, Ascensión Pastor, debido a una concentración celebrada ante su domicilio en diciembre de 1998. Figal introdujo un escrito firmado por Senideak en el que acusaban a la edil popular de tener "responsabilidad política y humana" en la dispersión de presos. El fiscal pedía dos años de cárcel por estos hechos, pero el juicio, que debía haberse celebrado en abril del pasado año, se suspendió.

Además, el fiscal de la Audiencia Nacional solicitó en julio de 2001 al juez Garzón que tomara declaración como imputado a Agustín Figal porque, junto a otras personas, "asistieron a las reuniones orgánicas de Ekin en las que estuvieron presentes los parlamentarios de Euskal Herritarrok José Antonio Urrutikoetxea y Jon Salaberria". Coincidiendo en el tiempo con esa petición, Figal desapareció de su domicilio.