Jesús Ponce (Novartis): “La música ‘heavy’ me relaja. Cuando tengo dos segundos me enchufo a Metallica”

Jesús Ponce (Burgos, 51 años) se define como un burgalés de arriba abajo. Toda su familia es de Aranda de Duero y pasó su juventud en Miranda de Ebro. Va cada vez que puede. Aunque el presidente de Novartis, y también de la asociación que representa los intereses del sector, Farmaindustria, reside en Barcelona, adonde le han llevado las oportunidades laborales junto a su mujer y sus tres hijas, “todas niñas, que es importante”, dice.

Pregunta. ¿Qué ocurre, se siente rodeado de mujeres?

Respuesta. Me siento rodeado y también siento que practico capacidades que luego me son muy útiles en el trabajo, como la paciencia, la escucha activa, la escucha selectiva, la relativización, la priorización... Estoy rodeado de emociones.

P. ¿Y qué tal las maneja en Novartis?

R. Pues bastante bien. Me autodefino como un hombre equilibrado. Con mucho equilibrio entre la cabeza y el corazón. ¿Qué puede más? Si me lo pregunta, no sabría decir. Le voy a contar un pequeño secreto. Mucha gente me pregunta por qué llevo dos relojes, uno en cada mano. Esto refleja el equilibrio entre el corazón y la razón. Soy racional para muchas cosas, pero siempre sobre una base emocional; estoy muy enfocado a las personas. Los relojes reflejan uno la razón, me da la hora, además de acceso a las tecnologías, a los mensajes, cuenta mis pasos... Y el otro, que me regaló mi mujer en el año 2010 cuando nos volvimos de nuestra aventura en Portugal, refleja la emoción. Aunque se retrasa y me cuesta mucho su mantenimiento, me encanta llevarlo porque me recuerda la sorpresa que me dio.

P. ¿Y a cuál de los dos hace más caso?

R. Normalmente al de la derecha porque tiene más funcionalidades, pero a veces se queda sin batería y entonces hay que tirar del corazón. Cuanto más emocional soy, más feliz estoy.

P. ¿Cuáles son sus aficiones?

R. Mis hobbies han ido evolucionando con la edad, pero hay cosas de base que se mantienen. Mi afición actual de los fines de semana es mi familia porque tengo a las tres niñas en edades adorables, 17, 15 y 10 años, y disfruto mucho pasando tiempo con ellas y compartiendo conversaciones de calidad. Además, siempre he tenido aficiones de base como la música. Mis momentos de pasión y de mayor energía están asociados con ella. Cada vez que tengo dos segundos saco mis cascos y me enchufo a Spoty o Apple Music. También me encantan los conciertos, voy al menos a 3 o 4 al año. Tengo una colección de entradas de conciertos, otra de cintas, también de discos y me encantan las guitarras. Tuve una y la regalé porque no la toco. Es mi pasión frustrada. Pero la compenso con creces yendo a conciertos, comprando materiales y disfrutando de la música heavy en todas sus versiones, que es mi preferida y me relaja.

P. ¿Cuáles son sus grupos favoritos?

R. Si tuviera que elegir uno, elegiría Metallica. Si fueran más, pondría Iron Maiden y Rammstein, que es el último concierto en el que he estado. Y entre los españoles, destacaría a Sober, el grupo madrileño en cuyo concierto conocí a mi mujer.

P. Dice que el heavy le relaja, ¿cómo puede con una música tan ruidosa?

R. Es verdad. Me relaja porque me permite inhibirme y pensar. Consigue varias cosas a la vez: me retrotrae mis raíces, a mi juventud, al primer CD que me compré cuando tenía 17 años en Canadá de Metallica. Y, por otro lado, me permite liberar la adrenalina. Soy una máquina de generación de adrenalina.

P. ¿Cómo es su fin de semana ideal?

R. Lo que normalmente hago y me encanta es hacer de taxista con mis hijas. Las llevo al voleibol, a un cumpleaños... Además de tener una comida familiar donde disfrutemos todos alrededor de la mesa. Y, si puedo ir a ver un concierto con amigos, y como broche de oro cerrar en el Bernabéu viendo al equipo de mis amores, que es el Madrid.

P. En Barcelona, debe llevar muy mal estar lejos del estadio...

R. Bueno, ahora lo llevo mejor. Paso mucho tiempo aquí en Madrid y soy socio del Real Madrid desde hace 24 años. No he perdido mi abono, aunque he estado mucho tiempo fuera. En mi fin de semana ideal si además hay un Madrid-Barça en el que ganamos a la heroica, en el último minuto, pues me voy feliz a la cama.

P. Eso no va a sentar muy bien en Barcelona...

R. Nadie que lea esto en nuestra empresa se va a asustar porque me conocen. Lo primero que hice cuando llegué a Novartis es presentarme como junto a mi familia con una fotografía de mis tres hijas abrazando la 13ª Copa de la Champions del Madrid. Ayudé a sacar del armario a unos cuantos madridistas.

P. He leído que dice que es un coleccionista compulsivo...

R. Ya no. He dejado de coleccionar porque coleccionaba de todo. Coleccionaba llaveros, postales, entradas, banderas de los países donde iba, tarjetas de hotel... mil cosas. Y me he quedado con tres: las banderitas de los países que visito, las entradas de los conciertos, y billetes y monedas de curso legal.

P. ¿Y en cuántos países ha estado?

R. En 38. Me gusta mucho viajar.

P. ¿Cuál ha sido su mejor viaje y cuál tiene pendiente?

R. El mejor viaje es posiblemente el que hicimos por Asia el verano pasado la familia. Por Singapur, Camboya, Vietnam y Bali. Y mi viaje he soñado es Nueva Zelanda.

P. ¿Duerme bien?

R. Súperbien, pero menos horas de las que debería. Entre semana duermo 6 horas y el fin de semana recupero un poquito, duermo entre 7 y 9.

P. ¿Tiene estrés?

R. He tenido momentos de mucho estrés, de muchos cambios y mucha presión. Cuando tienes que hacer cosas difíciles. Pero, ahora mismo, no.

P. ¿Y cómo combate el estrés?

R. Siendo muy disciplinado conmigo mismo, cuidándome. Intentando dormir lo más posible, aunque sigo teniendo un debe. Haciendo mucho deporte semanalmente. La natación es mi deporte, que practico tres o cuatro veces por semana. Para mí nadar es salud mental y física. Y cuidar la alimentación; no abusar de nada, ni tomar prácticamente alcohol. Y la otra pata para combatir el estrés, que es obligarme a socializar. Otra cosa que me ha ayudado muchísimo a quitar el estrés ha sido ser consciente de que lo mejor que puedo hacer es disfrutar del día a día. Reducir las ansiedades del futuro y del pasado.

P. Veo que, como presidente de una farmacéutica, tiene la lección bien aprendida.

R. Sí, cuidarse es la clave, que además intento trasladar a mi equipo. Animarles a hacerlo. Es importante, sobre todo cuando tienes agendas dobles y triples como yo, que soy presidente de la plataforma farmacéutica también y cuando no es un problema es otro.

P. ¿Y le da tiempo a conciliar?

R. Menos de lo que me gustaría, pero sí. Comparto el desayuno y la cena con mi familia, para mí es sagrado. Me escapo algún día a comer con mi mujer y luego, los fines de semana.

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