El cónclave de la gastronomía

Es uno de los buques insignia de la Fira de Barcelona. Alimentaria, antes conocida como Salón Internacional de la Alimentación que echó a andar en 1976, celebra una nueva edición entre el 4 y el 7 de abril. El evento, que está plenamente consolidada y con un grado de internacionalización cada vez más alto, coincide este año con Hostelco, feria de la restauración y el equipamiento hotelero.

A muy pocos días de la apertura, las cifras de la doble convocatoria resultan elocuentes. Más de 3.000 empresas presentes, 400 de ellas extranjeras, 52 países representados (entre ellos, naciones hasta ahora inéditas en este evento como Australia, Brasil, Puerto Rico, Canadá, Eslovaquia y Emiratos Árabes Unidos junto a países habituales como Estados Unidos, México, Perú, Colombia, Países Bajos o Túnez), un impacto económico previsto de alrededor de 180 millones de euros, siete pabellones y 85.000 metros cuadrados de superficie expositora.

Para José Luis Bonet, presidente de Alimentaria y de la Cámara de Comercio de España, resulta muy significativo que, en las presentes circunstancias, que tanto dificultan la movilidad geográfica, “una quinta parte de la oferta del salón corra a cargo de firmas de ámbito internacional”. En su opinión, este dato confirma el carácter de “referentes globales” tanto de Alimentaria como de Hostelco.

Innovación, excelencia gastronómica y sostenibilidad van a ser algunos de los conceptos clave de esta edición de Alimentaria. La apuesta por un crecimiento sectorial equilibrado, responsable y comprometido con la transformación tecnológica va a vertebrar The Alimentaria Hub, un espacio de intercambio de ideas que contará con intervenciones de más de 200 expertos. Incluirá también una plataforma de difusión para empresas emergentes bautizada como Digital Food Arena y un amplio espacio de exhibición gastronómica, The Experience Live Gastronomy, con talleres, catas y sesiones de cocina. Un festival, en fin, de arte culinario en directo que contará con seis escenarios y 30 chefs de primer nivel que acumulan 36 estrellas Michelin.

En estos primeros días de abril, Alimentaria y Hostelco coincidirán en la Fira con un evento en fase de consolidación, la Barcelona Wine Week. La cita de bodegueros y viticultores estaba prevista para febrero, pero el repunte de la pandemia se cruzó en su camino y forzó un cambio de calendario. Ahora llega con plena ocupación confirmada y la voluntad de convertirse en una cita profesional de referencia y una completa celebración de la cultura del vino. Javier Pagés, presidente del salón, explica: “El objetivo es dar un salto de calidad tanto a nivel cuantitativo como cualitativo, con el foco puesto en la enología, las denominaciones de origen o el turismo vinícola y actividades tan originales como un programa cultural en varios espacios de Barcelona, una fiesta de la garnacha o una exhibición de maridajes basados en criterios científicos”.