Descubre las formaciones de marketing ‘online’ más buscadas de 2023

Vivimos en una época de cambios constantes. La transformación digital impulsada por la pandemia ha impactado en todos los sectores productivos, pero en pocos lo ha hecho con tanta fuerza e intensidad como en el sector educativo y el del marketing y el comercio online. Las interacciones son cada vez más virtuales y las empresas se han dado cuenta de la importancia de generar contenidos digitales para conectar con los consumidores allá donde se encuentren, ya sea en redes sociales, en buscadores como Google o en plataformas como YouTube, Instagram o Twitch.

La creciente necesidad de perfiles especializados en este sector ha hecho que, a su vez, aumente también la demanda de formaciones de calidad, como el máster en Marketing Digital y Comercio Electrónico de EAE o el máster universitario en Marketing Digital de UNIR. Profesionales que sepan moverse en un entorno de futuro sin cookies y donde primará el contenido de calidad, la integración en redes sociales, las experiencias no intrusivas y los contenidos de vídeo, y donde el metaverso irá poco a poco adquiriendo forma. No en vano, los vídeos tienen 53 veces más probabilidades de posicionarse en las primeras posiciones en las páginas de resultados que otras técnicas de SEO, y el 93% de los especialistas en marketing aseguran que son ya una parte fundamental de su estrategia de contenido, según IEBS Business School.

Por otro lado, en un entorno multicanal como el que predominará en el futuro, cobran también una especial importancia perfiles quizá menos conocidos pero fundamentales en cualquier estrategia de marketing, como es el caso de los copywriters o escritores creativos, especializados en encontrar las palabras justas para llegar al corazón del usuario; descubrir lo que le emociona; conectar con sus valores; entretenerlo, sea cual sea la plataforma de comunicación; fidelizarlo y conseguir que tome una decisión de compra. Una variedad que obliga al copywriter a acomodarse a cada medio, “con contenidos líquidos que se adapten a la plataforma en la que se van a difundir. El nivel de precisión es tal que no sirven los mismos copies para dos redes social distintas; no puedes escribir de la misma forma para Facebook que para TikTok”, explicaba a este medio Luis Núñez, director de la agencia de contenidos MacLucan, el pasado mes de enero.

Optar por una formación especializada como, por ejemplo, el máster en Comercio Electrónico y Marketing Digital de ISEB, puede ser de especial utilidad si también aborda contenidos que serán importantes de cara al futuro, como es todo lo relacionado con el Big Data y la minería de datos, la inteligencia artificial, la importancia del SEO (Search Engine Optimization) y del SEM (Search Engine Marketing), y la narrativa transmedia, con profesionales que puedan llevar el mensaje de un lado a otro y que sepan unir esa narrativa.

¿Tendrá impacto mi máster?

Hace tiempo que realizar un máster ha dejado de ser simplemente esa herramienta con la que distinguirse sobre los demás candidatos en el mercado laboral. Más bien, hoy cabe preguntarse si acaso la situación no se ha dado la vuelta, y los que destacan son justamente aquellos que no lo cursan, colocándoles en una situación de franca desventaja. Entre los principales motivos para cursar un máster o posgrado, encontramos el conseguir un mayor reconocimiento profesional y mejores retribuciones salariales; acceder a prácticas en empresas y bolsas de trabajo; o incrementar la red de contactos que pueden sernos de utilidad en el desarrollo de nuestra carrera (networking).

Ahora bien, a la hora de elegir, ¿debemos guiarnos por la empleabilidad o por la vocación? Lo recomendable, sin duda, es tener en cuenta ambas. No hay que olvidar que el trabajo va a ocupar una parte importantísima de nuestra vida y desarrollo personal y profesional, y por eso, además de la remuneración, es importante escoger algo que nos guste y nos motive.

Otra de las cuestiones fundamentales tiene que ver con escoger el máster que más se adecúe a nuestras necesidades, según los objetivos y el tiempo del que se disponga, y si nos conviene más hacerlo de manera presencial, híbrida u online. Uno de los efectos colaterales de la pandemia fue, precisamente, un auge de la formación a distancia, y hoy ya quedan pocas dudas de que el hecho de que el formato sea virtual o híbrido no impacta negativamente en la calidad de la formación que se reciba: esta dependerá más de la institución que escojamos y del claustro de profesores. Por otra parte, los másteres híbridos ofrecen posibilidades de extraer lo mejor del aprendizaje presencial y en remoto, si bien exigen un mayor esfuerzo (en dedicación temporal síncrona) y del desplazamiento físico para asistir a las clases. A la hora de elegir centro, y además del precio, conviene fijarse en factores como el prestigio de la institución, la metodología empleada; el profesorado; la flexibilidad de la formación y la existencia de servicios como bolsas de trabajo o una red de alumni.

FORMACIÓN EL PAÍS en Twitter y Facebook

Suscríbase a la newsletter de Formación de EL PAÍS