La construcción de casas nuevas crece al mayor ritmo en 16 años

La construcción de vivienda ha pisado el acelerador en 2024. Los visados de dirección de obra nueva sumaron 127.721 unidades en el año, un incremento de casi el 17% respecto a 2023, cuando se concedieron 109.483 visados, según los datos publicados este jueves por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. No se veía un volumen tan alto de actividad desde 2008, que ha quedado grabado en la memoria nacional como el inicio del colapso del mercado inmobiliario. Después de ese año, los permisos cayeron de forma dramática hasta alcanzar un mínimo de 34.200 visados en 2013.

Como es habitual, el grueso del crecimiento se da en los edificios residenciales, aquellos grandes bloques de pisos en los que vive la mayoría de las familias. Se concedieron 102.251 visados para este tipo de viviendas, un 20% más que en 2023. También subieron, aunque con menos fuerza, las casas unifamiliares, con un 5% de incremento y un total de 25.341 unidades. Incluso hubo 129 visados para edificios distintos a estas categorías, una cifra pequeña, pero que triplica la de hace un año. El ritmo se mantuvo firme a lo largo del año, aunque destaca julio por ser el mes con el volumen más alto de visados concedidos: más de 12.500. Sin duda, contrarrestó la mala partida de agosto, que fue el momento más flojo del año, con poco más de 8.000 visados.

El aumento en la construcción de casas coincide con los esfuerzos del Gobierno por impulsar el mercado inmobiliario en un contexto de precios al alza y un déficit en el parque. En abril del año pasado, el Ministerio de Vivienda anunció una nueva orden ministerial para favorecer las licencias rápidas, que exigen menos requisitos que las de construcción habituales, para los promotores. Todo con el objetivo de agilizar la construcción de casas. No obstante, el ritmo de edificación todavía está lejos de cubrir la creciente demanda, especialmente en las grandes ciudades, según la mayoría de cálculos. “La falta de suelo finalista, la escasez de mano de obra y la incertidumbre regulatoria condicionan la puesta en marcha de nuevos proyecto”, destaca BBVA Research en su último informe sectorial de 2024.

Santiago Carbó Valverde, director de Estudios Financieros de Funcas, considera que “todo lo que sea crecimiento es favorable”, pero advierte que aún queda un largo camino por recorrer. “Es un ritmo que puede ser prometedor, pero faltan muchos años de crecimientos similares. Es decir, necesitamos varios años de crecimiento de casi 200.000 viviendas para cubrir el déficit actual”.

Durante la burbuja inmobiliaria de principios de siglo, España llegó a conceder casi 900.000 visados anuales, impulsados por el crédito fácil y la fiebre constructora. Se trata de un volumen desproporcionado que ningún analista aspira a que el país alcance. Sin embargo, insisten en que el problema actual es el otro extremo, pues la edificación fue tan escasa tras la crisis que ni siquiera es capaz de cubrir la formación de nuevos hogares, lo que desemboca en una escalada de los precios.

El Banco de España cuantifica el déficit en torno a 600.000 casas, tanto en venta como en alquiler. A su vez, la consultora inmobiliaria CBRE insiste en que la creación de hogares esperada en los próximos años es 2,5 veces mayor que la previsión de visados. Eso sin tener en cuenta que también hay oferta que trata de satisfacer la demanda de segunda residencia.

Previsiones para 2025

Los expertos creen que el auge de nuevos visados continuará en este año, BBVA Research apunta a un repunte del 15%, mientras que CaixaBank Research hizo una estimación mucho más moderada en su último informe sectorial, calculando 135.000 visados en el año. CBRE, por su parte, prevé que se superen los 140.000 permisos. Para Carbó, la clave está en seguir fomentando la promoción y la construcción de viviendas, pero sin perder de vista un problema adicional: la falta de mano de obra. “No tenemos acceso a tanta gente como en 2007, cuando muchos jóvenes entraron en el sector. Si queremos construir 700.000 viviendas, también tenemos que pensar de dónde sacaremos la mano de obra”, advierte.

Al respecto, los expertos señalan que la construcción es el sector donde más ha crecido el número de vacantes sin cubrir. Según BBVA Research, entre 2016 y 2023 el volumen prácticamente se ha triplicado. Además, los trabajadores en la construcción cuentan con una formación inferior y un envejecimiento superior a la media. A ello se suma la falta de suelo disponible en ubicaciones de alta demanda, algo que según la consultora inmobiliaria, condiciona el ritmo en la tramitación de licencias.