La producción de aceite de oliva crecerá casi un 50% esta campaña y abre el camino a una bajada de precios

El sector olivar español toma aire. La nueva campaña de producción, que oficialmente comenzó este 1 de octubre, superará los 1,26 millones de toneladas, según la previsión que este viernes ha hecho público el Ministerio de Agricultura.

Una cifra que es un 48% superior a la de la última campaña, y está casi un 80% por encima de la 2022-2023, que registró números históricamente bajos. De hecho, la cifra que prevé Agricultura supera en un 4% la media de las últimas seis cosechas.

Datos que “son positivos”, según ha valorado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en un comunicado, que espera que estos permitan “retomar la normalidad en los mercados”. Los precios del aceite de oliva han alcanzado en los últimos dos años cifras récord. Según los registros de Agricultura, el aceite de oliva virgen extra llegó a superar los 900 euros por cada 100 kilos en origen a principios de la campaña anterior, debido a la escasez de oferta por las persistentes sequías. El último dato, correspondiente a la semana del 23 al 29 de septiembre, era de 740 euros los 100 kilos.

Este año, la meteorología sí ha jugado a favor. Como explica Agricultura, “las lluvias producidas durante la primavera permitieron una buena floración y cuajado del olivo”, mientras que las condiciones climáticas de las próximas semanas “serán determinantes para garantizar la correcta evolución de la aceituna, en particular en el olivar de secano, en el que las precipitaciones en esta fase del cultivo son claves para la producción de aceite”. Andalucía, la principal región productora, incrementará un 77% la cosecha respecto al año pasado, y con un millón de toneladas aglutinará el 81% del total.

Agricultura no ha informado del enlace con el que cuenta en estos momentos el mercado, es decir, el excedente de la campaña que acaba de terminar y que sirve como base mientras llega la oliva de nueva cosecha. Este enlace se preveía muy escaso, debido a la baja producción de la pasada campaña.

El aumento de la producción abre el camino a una progresiva bajada de los precios. El presidente de Deoleo, uno de los grandes grupos envasadores de aceite de oliva a nivel mundial, mostró su optimismo antes del verano, después de las lluvias y temperaturas que hubo en las zonas de producción durante la primavera. “La campaña 2024-2025 puede ser la de la vuelta a unos niveles normales”, dijo entonces Ignacio Silva.

El aceite de oliva ha sido uno de los productos que han liderado las tablas del IPC desde que estalló la crisis inflacionaria. En octubre de 2023, el índice marcó una subida interanual del 73,5%, cuando en octubre de 2022 el aumento ya superaba el 15%. La categoría encadena cinco meses a la baja, llegando en agosto de este año a un alza interanual del 25,1%, el nivel más bajo desde mayo de 2023.

Su encarecimiento motivó, primero, la reducción de su IVA del 10% al 5% en 2023, lo que no frenó la tendencia, mientras que entre julio y septiembre el gravamen fue suspendido. Desde este octubre el IVA vuelve a subir al 2%, lo que ha tenido un efecto inmediato en los lineales de los supermercados. El litro de aceite de oliva virgen extra de marca blanca ha vuelto a subir por encima de los 9 euros.