Más del 90% de las pymes españolas prevén mantener o aumentar su plantilla en 2024

Más del 90% de las pequeñas y medianas empresas españolas esperan mantener o incrementar sus ventas, sus inversiones y su número de empleados al cierre de 2024, según datos del Informe pyme presentado este jueves por el Consejo General de Economistas y la Fundación para el Análisis Estratégico y Desarrollo de la Pequeña y Mediana Empresa (FAEDPYME). Las pymes son optimistas respecto a su facturación, un 53,9% esperan aumentarla en el cómputo global de este año. Asimismo, el 36,5% de las 636 empresas consultadas pronostican una subida de la inversión. En cuanto al empleo, el 32,7% confían en que aumentarán la plantilla este ejercicio, mientras que un 61,2% prevén mantenerla igual. Sin embargo, la mayoría de los encuestados acusan dificultades para cubrir puestos de trabajo. Como grandes obstáculos, señalan la escasez de oferta de candidatos, la falta de motivación de quienes acuden en busca de un puesto y los elevados costes laborales. A estos se suman “condiciones laborales inasumibles en términos de remuneración y horarios, entre otros”, reza el informe.

Para enfrentar la situación, las pequeñas y medianas empresas esperan que las Administraciones Públicas ofrezcan ayudas a la contratación y flexibilicen la legislación laboral. Esta última medida es especialmente solicitada por las micro y pequeñas empresas (hasta 9 empleados las primeras, y hasta 49 las segundas). En las últimas semanas, las patronales de las pymes han mostrado su desacuerdo con la ley de reducción de la jornada laboral que impulsa el Gobierno. Sus representantes aseguran que reducir el tiempo de trabajo sin recorte de salario puede amenazar su supervivencia, dado que disponen de menos recursos técnicos y humanos. En la presentación del informe, Valentín Pich, presidente del CGE, ha entrado en ese debate para señala que el debate sobre la reducción horaria “parece que va a traer más problemas que ventajas”.

El Ministerio de Trabajo ha concretado parcialmente esta semana, en el marco del diálogo con agentes sociales, su propuesta para paliar el impacto de la reducción de la jornada para las pymes. El departamento que dirige Yolanda Díaz puso sobre la mesa bonificar casi toda la cotización (del 80% al 100%) para las nuevas contrataciones en compañías con 10 trabajadores o menos. Salvador Marín, director del Servicio de Estudios del CGE, ha apuntado que hubiera sido mejor pensar “primero en pequeño”. “Pedimos que cuando se elaboren normativas se hagan dos tipos, pensando en lo que es una empresa grande y en lo que es una pequeña”, ha explicado.

La falta de personal cualificado es otra preocupación frecuente entre aquellos que gestionan las pequeñas empresas. Es un problema que, según el CGE, ha pasado de afectar del 3% al 62% de las empresas en la última década. Atribuyen la dificultad para atraer, retener y gestionar el talento a la poca preparación y la falta de compromiso de los empleados y candidatos.

En esta línea, el informe detalla que las empresas exigen la adecuación del sistema educativo a las necesidades del mercado, con un especial énfasis en el fomento de los oficios y la difusión de la cultura del esfuerzo. Respecto a la implicación de los empleados, Pich ha añadido que “ciertos debates no ayudan a realzar el valor del trabajo bien hecho” y más bien añaden una connotación negativa al trabajo, “que es parte de la vida”.

Falta de personal administrativo

Los oficios y servicios técnicos son los puestos que más les cuesta ocupar a las pymes, según se desprende la encuesta. A las empresas del sector servicios se les dificulta más cubrir vacantes de personal administrativo y de soporte, así como profesionales del ámbito legal y el financiero. Por su parte, el comercio enfrenta mayores desafíos para contratar comerciales, pero lo ha tenido más fácil a la hora de encontrar trabajadores administrativos y del ámbito legal.

Manuel Samohano, uno de los coordinadores del informe, ha destacado que las microempresas son especialmente sensibles a los cambios, y ha citado el impacto de la vuelta al trabajo presencial, posterior al estallido de la covid, como un ejemplo que ha complicado a las compañías. Por su parte, Ángel Meroño, que también coordina el estudio, ha abogado por que las pymes reciban un trato preferencial, dado que suponen un gran porcentaje del empleo en España y “son la puerta a proyectos de mayor tamaño”. “Hay que hacer lo posible por cuidarlas”, ha sentenciado.

La falta de representación femenina en las cúpulas empresariales no es un problema exclusivo de las grandes corporaciones. El Informe pyme 2024 detalla que solo el 19% de estas compañías están dirigidas por mujeres, con mayor presencia en las microempresas (23%) y en las empresas de servicios (24%). Mientras tanto, la presencia de mujeres en los equipos directivos alcanza el 32%, con una clara tendencia: las pymes lideradas por una mujer son más proclives a incorporar a otras en lo más alto de la estructura empresarial. No obstante, destaca que el porcentaje de empresas pequeñas y medianas sin mujeres en la plantilla asciende al 43%.