Miguel Corgos: “El Gobierno es demasiado débil para reformar la financiación autonómica”
El consejero de Hacienda de Galicia pide más recursos para el sistema y cree que las comunidades pueden llegar a un consenso sobre la renovación del modelo
“Para la reforma [de la financiación autonómica] se necesitan dos cosas: estar en una situación económica de crecimiento y contar con un gobierno fuerte que pueda defender su propuesta. Esa segunda circunstancia no se da”, valora Miguel Corgos (A Coruña, 52 años), economista, alto funcionario y consejero de Hacienda y Administración Pública de Galicia (PP). Lo hace durante una entrevista con EL PAÍS en Madrid, en la Casa de Galicia, sede de la Xunta en la capital, pocos días después de que se celebrase el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), la reunión del Ministerio de Hacienda con los consejeros autonómicos de la rama. Pide que la negociación sea entre todas las comunidades y que se inyecte más dinero al sistema. “Se puede llegar a un consenso” entre autonomías, defiende, aunque es “pesimista” sobre la posibilidad de que la reforma llegue en esta legislatura: “El Gobierno no tiene la fortaleza ni la iniciativa que se necesitan para llevar a cabo esta empresa que es realmente compleja”.
Pregunta. ¿Esperaba que Hacienda presentase una propuesta de reforma del sistema de financiación en el CPFF?
Respuesta. Algunas comunidades pedimos que pusiese de manifiesto cuál es su postura. Ya conocemos las propuestas de las comunidades, las hemos puesto de manifiesto varias veces. Nos falta saber cuál es la del ministerio, que es el que gobierna y al que le corresponde presentarla, y con cuántos recursos contaría.
P. ¿Hace falta más dinero?
R. Desde 2009 [cuando se aprobó el esquema actual], los grandes impuestos cedidos que financian el sistema [IRPF, IVA e impuestos especiales] han seguido una senda de crecimiento, pero la mitad de ese crecimiento no ha ido a las comunidades, como teóricamente correspondería. Hay un desacople entre recaudación y financiación. Mientras tanto, las políticas de gasto que son competencia de las comunidades no paran de crecer, sobre todo en sanidad.
P. ¿Le falta voluntad política al Gobierno?
R. Más que voluntad, creo que no tiene capacidad política, quizás porque es un gobierno demasiado débil y no tiene la fortaleza ni la iniciativa que se necesitan para llevar a cabo esta empresa que es realmente compleja. Para la reforma se necesitan dos cosas: estar en una situación económica de crecimiento, para favorecer las negociaciones con más recursos, y contar con un gobierno fuerte que pueda defender su propuesta. Esa segunda circunstancia no se da.
P. El Gobierno dice que las comunidades del PP, que son la mayoría, no se ponen de acuerdo.
R. No tengo esa visión. Todas coincidimos en que urge la reforma y en que el sistema debe garantizar una financiación de los servicios públicos que son competencia de las comunidades en condiciones similares en cualquier territorio. Cada una puede poner de manifiesto los aspectos que más le preocupen debido a su realidad socioeconómica, pero se puede llegar a un consenso.
P. ¿Cuáles son las prioridades de Galicia?
R. En primer lugar, que se negocie la reforma entre todas las comunidades. En segundo lugar, la suficiencia de recursos. En tercer lugar, que se garantice ese igual acceso a los servicios públicos para todos los españoles, independientemente de donde residan. Eso pasa por diseñar un sistema que se reparta según las necesidades, teniendo en cuenta que el coste de prestar los servicios no es el mismo en todos los territorios. Por último, se debe garantizar la autonomía fiscal de las comunidades.
P. En Galicia es más caro prestar los servicios.
R. Ahora que se habla tanto de singularidades, Galicia tiene un problema que es singular: la dispersión de la población. Eso encarece el coste porque hay que multiplicar los servicios. Si tuviéramos el mismo número de colegios que la media de España, tendríamos 343 menos; en el caso de los centros de Atención Primaria, serían 240 menos. Abrir todos esos centros cuesta dinero. El segundo factor es el envejecimiento. Más del 25% de nuestra población es mayor de 65 años.
P. ¿Qué opina de la propuesta de financiación singular de Cataluña?
R. No la comparto, no tiene sentido en el marco establecido. Parte de un presupuesto de cesión de soberanía fiscal total del Estado central a una comunidad, que es una excepción recogida en la Constitución para el País Vasco y Navarra, pero que no tiene otra comparativa a nivel mundial, ni en ningún Estado federal siquiera. La aportación a la solidaridad en base a un fondo que negocie una comunidad con la Administración central, dejando al resto de las comunidades fuera, pues tampoco la compartimos.
P. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado que quien negocia la financiación singular con ERC no es el Estado, sino el PSC. ¿La parece legítimo?
R. No, precisamente porque creo en el derecho igualitario de acceso de todos los ciudadanos a los servicios, y que el foro adecuado para resolver eso es el CPFF.
P. ¿Habría que reformar también el régimen foral?
R. El régimen foral tiene sus características, recogidas en la Constitución, y hay que respetarlo. Otra cosa es que los diferentes elementos que lo componen sean objeto de un cálculo más estricto.
P. ¿Es decir que habría que revisar el cálculo del cupo y de la aportación?
R. Ya tienen sus reglas de cálculo, pero igual las comunidades forales deberían colaborar más a la solidaridad como el resto de los territorios.
P. ¿Cree que se logrará la reforma de la financiación en esta legislatura?
R. Como dije antes, para que salga adelante es necesaria una situación económica de crecimiento y que haya un gobierno fuerte. Y no sé cuánto va a durar este gobierno, que hoy desde luego está en una situación de debilidad extrema.
P. ¿Podemos decir que es improbable?
R. Podemos decir que soy pesimista.
P. Lo que parece seguir adelante es la condonación de la deuda autonómica.
R. No la entendemos dentro de la lógica del sistema de financiación. Tiene otra lógica, la de unos pactos de investidura que nada tienen que ver con las necesidades financieras de las comunidades. Dicho esto, no va a resolver los problemas de los territorios sobreendeudados y presenta unos riesgos reputacionales importantes. En cualquier caso, creo que es importante que todas las comunidades puedan salir al mercado, y si sale adelante exigiremos exactamente el mismo trato que se les dé a las demás.
P. Han empezado a diseñar los Presupuestos para 2025. ¿Tienen toda la información que necesitan?
R. Vamos a ajustarnos al objetivo de estabilidad que se aprobó en el CPFF, aunque no sabemos cómo se van a aplicar las nuevas reglas europeas. A día de hoy [por el pasado jueves] tampoco disponemos de la cifra de las entregas a cuenta que nos tiene que dar el ministerio.
P. ¿Habrá nuevas medidas fiscales?
R. Si tienen encaje en la senda de gasto que nos han dado, valoraremos introducirlas.
P. ¿Más rebajas de impuestos?
R. Estará la que ya hemos anunciado, la rebaja para el grupo tres en el impuesto de sucesiones. Cuando hay margen, intentamos tomar medidas fiscales para aliviar las economías familiares, generar riqueza, o para que se mantenga esa riqueza en nuestra comunidad, teniendo en cuenta que somos un territorio fiscal descentralizado.
P. ¿Se refiere a otras comunidades o a Portugal? La portavoz del grupo socialista en el Parlamento gallego les acusa de bajar impuestos los ricos.
R. Con algunas de las medidas tributarias no solo intentamos generar riqueza y empleo, sino que no se nos vayan los patrimonios de nuestra comunidad. De Vigo a Portugal es un cuarto de hora. En Portugal no se paga el impuesto de patrimonio, en Galicia sí.
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