La Autoridad Fiscal alerta del crecimiento del gasto público y pide medidas correctivas

La Autoridad Fiscal alerta del riesgo de que este año se incumplan los límites al gasto impuestos por las recomendaciones europeas y por la legislación nacional. Ante este dinamismo de los desembolsos, la institución solicita que se activen las medidas correctivas y que se llame a capítulo, como está contemplado en la ley, a todas las comunidades y a una decena ayuntamientos de los que hace seguimiento. Además, aunque no está recogido en la legislación, la Administración central también debería rendir cuentas igual que hacen las regionales y locales, ha señalado Cristina Herrero, presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef). Y ha recomendado que el ministerio de Hacienda comparezca ante el Congreso para dar explicaciones y exponer medidas que sirvan para reconducir el gasto.

La regla de gasto nacional, establecida en la ley de estabilidad presupuestaria, fija un límite a los desembolsos en función del crecimiento tendencial y se situaba para este año en el 2,6%. Es decir, los desembolsos no deberían crecer por encima de esa cifra. Y el techo al gasto que impone Europa en sus recomendaciones a España también era del 2,6%. Sin embargo, se computan de forma distinta: la regla nacional no incluye, por ejemplo, las pensiones, mientras que la europea sí. Por administraciones y usando la regla nacional, los desembolsos crecen un 4,8% en la Administración central; un 6,7% en las comunidades, y un 7,3% en las entidades locales. Todas incumplen de largo con los datos a mitad de año. Si se toma el método de cálculo para la recomendación europea, que resta las medidas de ingresos o los intereses, el gasto del conjunto de las Administraciones crece un 4,3%, según las estimaciones de la Airef. Y la Comisión Europea ya había concluido hace un mes y con menos información que este gasto subía un 3,8%.

Herrero ha advertido que, de confirmarse el incumplimiento, esto implicaría un deterioro estructural, empeorando el punto de partida del plan fiscal que tiene que presentar España en Bruselas con el objetivo de rebajar la deuda pública a medio plazo. Para corregir esta desviación del gasto, según la recomendación europea, haría falta un ajuste del 0,7% del PIB, unos 11.000 millones, lo que dejaría el déficit en el 2,3% del PIB frente al 3% con el que prevé cerrar el Gobierno el año.

El déficit se cumple

Dicho esto, la Airef cree que el conjunto de las Administraciones cumplirá con el objetivo del 3% del PIB de déficit, que bajaría desde el 3,6% registrado en 2023. La institución ya había indicado que este año iban a ser mucho más exigentes las reglas de gasto que el objetivo de déficit comprometido. Aun así, el aumento del gasto hará que las comunidades empeoren algo su déficit respecto a lo que preveía la Autoridad Fiscal, que ahora acabará el ejercicio en un 0,3% del PIB en lugar del 0,1% anticipado en abril. De acuerdo con las previsiones del organismo fiscalizador impuesto por Bruselas, la deuda bajará este año en dos puntos hasta el entorno del 105% del PIB.

“Desviar la atención hacia la deuda y el déficit alienta comportamientos estratégicos. Cuanto mayor sea tu nivel de partida, más margen de gasto en millones para el futuro. No sabemos hasta qué punto se busca este comportamiento estratégico de tener una base de gasto más grande. Así que esto tiene consecuencias en la consolidación fiscal”, ha declarado Cristina Herrero.

Optimismo con las previsiones a medio plazo

Por otra parte, la Autoridad Fiscal ha elevado su pronóstico de crecimiento para este año del 2% al 2,4%. Y considera que el crecimiento que ha previsto el Gobierno para el año que viene, del 2,2%, es factible dado el buen momento cíclico, incluso si es ligeramente más alto que el de la Airef, del 1,9%, y el del consenso de Funcas, del 2%. Sin embargo, cree que las proyecciones de crecimiento que hace el Gobierno para más adelante son optimistas, sobre todo si se tiene en cuenta el escenario de consolidación fiscal y la debilidad de la productividad. El Ejecutivo ha vaticinado un 2% de crecimiento para 2027, cuando antes preveía un 1,6%.

El escenario macroeconómico a medio plazo “descansa en una recuperación de la inversión que está sujeta a riesgos”. Y lo mismo ocurre con las previsiones a futuro sobre la productividad, el consumo o el aumento de la población activa. “Se deberían explicar los factores que llevan a situar el crecimiento potencial en el entorno del 2%”, apunta el informe de la Autoridad Fiscal. “Todavía no hemos visto análisis claros sobre cuáles son los impactos del Plan de Recuperación o de la reforma laboral en el crecimiento potencial. No es fácil ver los cambios estructurales y aún no ha pasado mucho tiempo, así que el Gobierno debería explicitarlos”, ha recordado Herrero.

La Autoridad Fiscal ha cifrado el coste de las medidas que todavía siguen vigentes contra la inflación en unos 0,3 puntos del PIB, unos 4.500 millones de euros. Estas incluyen las ayudas en la factura eléctrica y la rebaja del IVA de los alimentos básicos. El ajuste de este año se basa en buena medida en la retirada progresiva de estas iniciativas, cuyo coste el año pasado fue de unos 12.000 millones.

La Airef ha reclamado que se cifren cuáles van a ser las proyecciones de gasto en defensa, dado que esta partida se sitúa en el 1% del PIB y hay un compromiso con la OTAN de subirla hasta el 2% para 2029. También ha pedido que se den cifras de las posibles contingencias fiscales, ya que este año ha habido varias sentencias contra el Estado que van a aumentar el déficit hasta en dos décimas de PIB. Tampoco se cuenta con datos de contabilidad nacional sobre la ejecución de los fondos europeos, ha insistido una vez más el organismo.

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