El coste económico de los desastres naturales en la UE: 650.000 millones en los últimos 40 años
España es el cuarto país que registra las mayores pérdidas, con el 13% del total. Europa es el continente que se calienta más rápido, al duplicar la tasa media mundial desde 1980
El cambio climático no solo ha elevado la temperatura de la Tierra a los niveles más altos registrados en la historia, también ha ocasionado que el mundo sea un poco más pobre. En la Unión Europea, el coste económico de los desastres naturales ha generado un total de pérdidas por 650.000 millones de euros en los últimos 40 años, de los cuales un 17% se produjeron solo entre 2021 y 2022. Los principales países afectados son el corazón del bloque: Alemania, Francia, Italia y España, según la Agencia Europea de Medio Ambiente, que prevé que los fenómenos extremos relacionados con el clima se intensifiquen en los próximos años, lo cual deja poco margen para que la merma financiera asociada a estos eventos reduzca para la siguiente década.
La agencia recuerda que las pérdidas anuales de 2022, el último año analizado, fueron un 41% superiores a las de 2009, lo que constata el aumento del poder destructivo de los fenómenos meteorológicos. Si se echa la vista atrás, es más evidente el salto cuantitativo. Mientras los daños rondaron los 10.400 millones de euros entre 1981 y 1990, en 2021 y 2022 fueron de más de 52.000 millones, coincidiendo con dos de los años más cálidos a nivel mundial de los que hay registros.
En un balance histórico, se observa que Alemania —el motor económico del continente— ha sido el principal afectado, con una descapitalización de casi 167.300 millones de euros. Le sigue Francia, a la que los desastres naturales le ha costado más de 120.600 millones, e Italia, con 111.100 millones. España es el cuarto país europeo más afectado por las catástrofes climáticas: los daños superan los 83.700 millones, es decir, el 13% del total de pérdidas financieras que Europa ha registrado en los últimos 40 años. Julián Cubero, economista líder en cambio climático de BBVA Research, precisa al respecto que la zona del mediterráneo, donde se encuentra el país, es una de las áreas que más va a sufrir olas de calor a largo plazo, por lo que es previsible que la cifra vaya en aumento. No obstante, “los costes no son diferencialmente superiores si se tiene en cuenta el peso de la economía española en Europa”, añade.
El aumento de las temperaturas es especialmente grave en el caso continente. El Servicio de Cambio Climático de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial señalaban en un informe de abril de este año que es la región que más rápido se está calentando: al doble de la tasa media mundial. Según este documento, los tres años más cálidos registrados en Europa han ocurrido desde 2020.
El ritmo acelerado del cambio climático está asociado con un aumento en la frecuencia de los incendios forestales, la sequía, olas de calor, huracanes y grandes tormentas. Y aunque no sean catástrofes que ocurran constantemente, la gravedad de los eventos sí aumenta, lo que implica fuertes reveses económicos. Por ejemplo, las inundaciones de 2021 en Alemania y Bélgica dejaron una merma de 44.000 millones de euros, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. En un análisis más general, se observa que solo el 5% de las catástrofes y eventos climatológicos adversos son responsables de casi el 60% de todos los descalabros financieros.
Su impacto en el Producto Interior Bruto (PIB) de los países es incierto. De acuerdo con Cubero, las estimaciones cambian cada año porque todavía están en proceso de construcción y a medida que la tecnología avanza, son más acertadas. Lo que no varía es el empeoramiento del panorama; “las afectaciones a futuro no reducen, a pesar de que las políticas para combatir el cambio climático son mejores, porque el deterioro es mayor de lo previsto. Por eso hay que ser más ambiciosos en la lucha”, agrega el analista.
Daños a las costas en España
Playas que desaparecen, deltas en peligros, chiringuitos destrozados por temporales y comunidades pesqueras cada vez más vulnerables. La incesante subida del nivel del mar es uno de los grandes peligros para el continente en general, y para España en concreto. Los daños económicos causados por las inundaciones en las costas de la Unión Europea ascienden actualmente a 1.000 millones de euros al año y se estima que 72.000 personas están expuestas a sus efectos nocivos, según el Informe sobre la economía azul de la UE 2024, publicado a finales de mayo por la Comisión Europea. Los investigadores prevén los daños anuales aumenten entre 137.000 y 814.000 millones de euros para 2100, dependiendo de los escenarios de emisiones y mitigación que los gobiernos sigan.
Desde 1900, el nivel medio del mar ha aumentado casi 21 centímetros, con una tendencia acelerada. En las últimas dos décadas, la tasa se ha duplicado y actualmente asciende a 3,7 milímetros por año. Si bien las proyecciones varían según los esfuerzos para reducir los efectos dañinos, en un escenario de altas emisiones, el nivel del mar podría aumentar hasta un metro para 2100, lo que traería consecuencias devastadoras para los lugares con extensas costas y zonas bajas, como las Islas Canarias, que pese a todo no sería la zona más afectada. En cambio, el documento alerta de que la Guayana Francesa y Guadalupe son algunas de las regiones más vulnerables y el daño podría alcanzar en un futuro lejano —para el año 2150— un 10% de su PIB.
Sin precisar el impacto en el crecimiento nacional, las constantes inundaciones irían en detrimento de la actividad económica que se asocia a las costas, una joya nacional. España es uno de los cinco miembros de la UE que más dinero mueve por la llamada economía azul. También es el país que más empleos genera en esta rama, seguido de Alemania, Grecia, Francia e Italia —juntos acaparan casi el 70% de todos los trabajos—. A su vez, es líder en el sector turístico de costa, tanto por número de ocupados como por el valor agregado que genera.
Sigue toda la información de Economía y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.