La industria turística pronostica para este verano un alza récord de los ingresos del 10,9% respecto a 2019
La patronal Exceltur revisa al alza sus previsiones del PIB del sector, que cerrará por encima del nivel prepandemia por la inflación
El turismo resiste a pesar de la inflación y sus efectos, sobre todo en el bolsillo de los consumidores. La actividad, que ya empezó el año al alza, aceleró su crecimiento en el segundo trimestre con un aumento del PIB turístico del 15,7% respecto a 2019, último año antes del golpe de la pandemia, según los datos de Exceltur, que agrupa a las grandes empresas de la industria. Este incremento se explica por la “atípica fortaleza” de la demanda, en especial de turistas extranjeros, y los precios: sin tener en cuenta la inflación, el PIB turístico está un 0,3% por debajo del segundo trimestre de 2019. Para el verano, las previsiones son optimistas, con un incremento de los ingresos del 10,9% entre julio y septiembre respecto a hace cuatro años.
Este pronóstico refleja una “intensidad levemente por debajo del muy positivo desempeño” del segundo trimestre, advierte Exceltur, que ha presentado este jueves en Madrid su informe sobre la actividad correspondiente al segundo trimestre y ha actualizado sus previsiones para el verano. La organización ha revisado al alza su estimación del PIB turístico para el conjunto de 2023, que sumará 178.831 millones de euros, un 13,6% más que en 2019, año que se toma como referencia clave para valorar el estado de salud del sector. Sin embargo, si se descuenta la inflación, la cifra real estaría todavía un 1% por debajo, lo que “supone situarse por detrás de la recuperación del resto de la economía española, que ya está en positivo”. El Banco de España calcula en su último escenario macroeconómico, difundido en junio pasado, que el PIB está un 0,9% por encima de 2019 en precios constantes.
El incremento de los ingresos del segundo trimestre se debió principalmente a la demanda extranjera, que se tradujo en un aumento de las ventas de las empresas del 12,7% respecto a 2019. La demanda española mantiene su dinamismo, según Exceltur, con un incremento de las ventas del 10,6% en igual periodo.
Respecto al empleo, el sector turístico intensificó los ritmos de creación de puestos de trabajo en el segundo trimestre, con una ligera desaceleración en junio, que se cierra con 126.815 afiliados más a la Seguridad Social que en el mismo mes de 2019, el 19,1% de la creación de empleo en España. La tasa de temporalidad se sitúa en mínimos históricos del 7,9% en el inicio de la temporada de verano (la más marcada por la estacionalidad) y se sitúa, con datos de junio, en la mitad de la media española (14,3%).
Mantener los márgenes
“El mantenimiento de los márgenes se erige como el principal desafío a corto plazo para las empresas turísticas españolas”, advierte Exceltur, por el crecimiento acumulado de los costes desde el inicio de la espiral inflacionista. Los costes financieros han subido un 20,9%; los laborales, un 14,9%; los carburantes, un 35,4%; la electricidad y el gas, un 27,4%, y los suministros, un 24,2%, según sus datos. “Ello ha provocado que la mejora de resultados se haya producido por una mayor rotación y volumen de ventas y aún no, por una mejoría de márgenes”.
Según el observatorio de márgenes empresariales que han constituido el Ministerio de Economía, el de Hacienda y el Banco de España con datos tributarios, de encuestas y registros, los sectores que más sufrieron la pandemia, como el turismo, la hostelería y el transporte, tuvieron una acusada caída de márgenes. Sin embargo, con la reapertura de la actividad han ido recobrándolos y ya se encuentran, desde finales de 2022, en cotas similares a los años previos a la covid. “Los mayores descensos del margen se registraron en los subsectores vinculados al turismo, como el transporte o la hostelería, que sufrieron una caída del 75% entre finales de 2019 y el primer trimestre de 2021 debido al desplome de la demanda”, explica el documento, publicado el 3 de julio.
El sector destaca la inversión realizada en la mejora de productos y servicios turísticos (alojativos, gastronómicos, comerciales, culturales, de eventos, de ocio, negocios y de transporte) “ofreciendo de manera creciente experiencias de un mayor valor añadido”. Exceltur destaca que en el sector hotelero, el número de plazas de 4 y 5 estrellas ha aumentado en 62.000, mientras han descendido en 40.000 las de 1 a 3 estrellas, hostales y pensiones).
Exceltur ha pedido al nuevo Gobierno que salga de las urnas el 23 de julio que promueva un PERTE para estimular la renovación del litoral español, una medida que el sector lleva pidiendo desde la pandemia. También considera que las competencias de Turismo deben estar en una Secretaría de Estado dependiente de la Presidencia o del Ministerio de la Presidencia, o de Transporte. Ahora están bajo el paraguas de Industria.
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