El Santander disparó casi un 40% el número de banqueros millonarios en nómina en 2022

La banca sigue en el ojo del huracán. En año electoral y en plenas presentaciones de resultados millonarios del primer trimestre de 2023, los altos salarios de sus directivos contrastan con un entorno económico complejo en el que los trabajadores acumulan importantes pérdidas de poder adquisitivo. El caso más paradigmático es el del Banco Santander: disparó un 37,62% el número de banqueros millonarios en el ejercicio pasado, de 202 a 278 financieros que ganaron más de un millón de euros, según se recoge en su Informe con Relevancia Prudencial 2022. El BBVA también crece, aunque en menor medida: un 5,66% hasta los 56 directivos con altos emolumentos.

Este aumento se explica principalmente por la competencia de los bancos globales, según fuentes de la entidad que preside Ana Botín. Por ejemplo, el Deutsche Bank alemán cerró el año con 572 directivos que ganaron más de un millón. El francés Société Générale suma 144 financieros millonarios, casi un tercio más que un año antes, y el italiano Intesa San Paolo pasó de tener 55 directivos que se embolsaban más de un millón a 81, casi un 50% más. Estas fuentes añaden además varios motivos que justifican el movimiento: el efecto de la inflación que ha provocado revisiones salariales (en algunos países de América Latina es casi automático, al estar vinculado a la evolución del IPC), incrementos por mérito y el pago de variables por cumplimiento de objetivos, especialmente en banca de inversión.

Si se miran las horquillas de ingresos se constata que la mayor parte de la subida en número de empleados se da en el primer tramo, entre 1 y 1,5 millones (53 directivos más). La siguiente franja que más sube es entre 2,5 y 3 millones (gana nueve personas con esos emolumentos) y entre 4 y 4,5 millones (hay siete trabajadores más).

“Los datos recogidos en esta tabla son un reflejo del modelo de negocio de Grupo Santander, con fuerte presencia en Estados Unidos y Reino Unido (cuyos salarios están adaptados al mercado local en términos de competitividad y coste de la vida) y con una positiva evolución en los últimos años de la actividad de Corporate and Investment banking”, explica la entidad en el informe. Según los criterios para definir lo que se denomina como Colectivo identificado, en el grupo había hasta 1.029 directivos, de los que un 27% superaron el millón.

Al empleado que le corresponden unos mayores ingresos por el ejercicio pasado se sitúa en la franja entre 17 y 18 millones de euros (en 2021, la retribución máxima se quedó entre 13 y 14 millones). Los dos siguientes se encuentran uno entre 14 y 15 millones y otro entre 13 y 14 millones. “No significa que se hayan embolsado eso. Es el máximo potencial que pueden recibir, lo que les correspondería, aunque parte puede ser diferida y su pago dependerá del cumplimiento de objetivos”, explican fuentes del grupo. Estas cantidades incluyen primas de fichaje e indemnizaciones: la mayor en el año fue una prestación que alcanzó los 9,3 millones, según se detalla en el informe, aunque no dice a qué trabajador se refiere. Además, no solo se abona en efectivo, ya que hay una parte que se suele retribuir con un paquete de acciones u otros instrumentos.

BBVA también crece

Ocurre algo parecido con el BBVA, aunque a mucha menor escala. También creció en número de directivos que ganaron más de un millón de euros: fueron 56, tres más que un año antes, aunque todavía tres por debajo de los que sumaba en 2019, antes de la irrupción de la pandemia. Fuentes de la entidad sostienen igualmente que este efecto se debe al alza de la retribución variable. En su caso, el Colectivo identificado incluía a 320 directivos, de los que rebasaron la barrera del millón un 17,5%.

La horquilla donde se produce el mayor incremento es entre 1,5 y 2 millones (pasa de 11 a 17 empleados con esos emolumentos). Y a los que más ingresos les corresponden son dos financieros que recibieron entre siete y ocho millones (el ejercicio anterior había solo uno en esta franja y otro en la inmediatamente inferior, entre seis y siete millones).

Los altos dirigentes de ambos grupos españoles se sitúan en la parte alta de esas remuneraciones, aunque no todo lo que se embolsaron en 2022 se consolida en la tabla (hay una parte que no se suma en este caso). Ana Botín, presidenta del Santander, ganó 11,7 millones, y José Antonio Álvarez, entonces consejero delegado, se embolsó 9,57 millones. En el BBVA, el presidente Carlos Torres recibió 8,29 millones, mientras que el consejero delegado, Onur Genç, ganó 7,15 millones.

El BBVA explica asimismo que hay una parte del variable a recibir por estos financieros que se paga en años posteriores, en función de objetivos. “De la retribución variable anual de 2022, un 60% ha quedado diferida y, por tanto, no se encuentra consolidada, estando sometida a indicadores de evaluación plurianual relacionados con el Marco de Apetito al Riesgo y la rentabilidad para el accionista que podrán minorar su importe (nunca incrementarlo) y a cláusulas malus”, matiza el banco en su informe.

Competencia global

Un factor relevante en la evolución de ambos transatlánticos es la lucha con otros grupos más allá de las fronteras nacionales. De hecho, los bancos que centran su negocio en el país, por ejemplo CaixaBank, no aumentaron el número de directivos que ganan más de un millón. La diferencia con el Santander y el BBVA es que generan la mayor parte de sus beneficios en otros mercados (España aportó menos de un cuarto de sus beneficios en 2022).

“El Santander y el BBVA compiten con los mayores bancos del mundo, no solo con los españoles”, relata Leopoldo Torralba, economista de Arcano Economic Research. Además, señala que si el Santander está potenciando el área de banca de inversión también redundará en el incremento: “En esa división hay unos salarios medios más altos”. Por ejemplo, la entidad que preside Ana Botín se ha lanzado por el fichaje de perfiles de esta división de Credit Suisse para tener más presencia en Wall Street, según adelantó el Financial Times.

Sobre los altos emolumentos de una parte de la plantilla, la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) publica un informe en el que realiza una comparación por países del Viejo Continente. Un ejercicio que repetirá en los próximos meses. En el último estudio disponible, que hace referencia a 2021, contabilizó 1.957 financieros del sector que se embolsaron una cantidad superior al millón de euros. Esto es, un 41,5% más que en el ejercicio de la pandemia. Por países, España se situó como el cuarto con mayor número de esta élite bancaria, superado por Alemania, Francia e Italia.

Si se repasan los informes de cierre de 2022, en Alemania está Deutsche Bank, que cuenta con 572 banqueros que ganan más de un millón de euros. Esto es, 52 más que el ejercicio anterior y más del doble que el Santander. En el caso del francés Société Générale suma 144 financieros millonarios, casi un tercio más que un año antes, según figura en su resumen anual. Y en Italia está Intesa San Paolo: pasó de 55 directivos que se embolsaban más de un millón a 81, casi un 50% más.

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