Acciona y Nordex se unen para producir hidrógeno verde en zonas con mucha generación eólica

Las compañías energéticas Acciona y Nordex se unen para desarrollar un proyecto de hidrógeno verde del que resultarán 0,5 millones de toneladas de este combustible al año. Los primeros proyectos, que se desarrollarán fuera de España, arrancarán en 2027 y las previsiones de las compañías es que este nivel de producción se mantenga durante los próximos diez años.

El negocio conjunto se distribuirá a partes iguales entre las dos compañías —Acciona y Acciona Energía se distribuirán un 25% cada una y Nordex el 50% restante del negocio—. Para cerrar la operación, la empresa de promoción de infraestructuras ha adquirido la mitad de la filial de Nordex por un importe aplazado de 68 millones de euros, a pagar durante los próximos cuatro años. Nordex se dedica fundamentalmente a la fabricación de turbinas de aerogeneradores y explotará los recursos eólicos disponibles en las zonas de implantación de los proyectos, que aún están por determinar.

“El hidrógeno verde será clave para acabar con las emisiones de gases de efecto invernadero en sectores de muy difícil descarbonización, como la industria, la agricultura, o el transporte aéreo y marítimo”, afirmó José Manuel Entrecanales, presidente y consejero delegado de Acciona. Además, ha interpretado esta nueva alianza como un complemento a la que la compañía ya mantiene en la península con la estadounidense Plug Power desde 2021. La misión de esta última es ofrecer la tecnología de electrolisis, mientras que Acciona se encarga de entregar la electricidad procedente de fuentes renovables.

En el caso de la alianza con Nordex, las operaciones se llevarán a cabo en zonas no conectadas a redes eléctricas convencionales. Cada uno de los proyectos tendrá un tamaño mínimo de 1GW de potencia renovable instalada y en ellos participarán otras compañías e instituciones de carácter público y privado, interesadas en la producción o en el consumo masivo de hidrógeno verde. Se potenciará el uso de energía sostenible, la gestión eficiente de las instalaciones industriales, el tratamiento de aguas y el desarrollo de infraestructuras.

En los últimos años España aspira a convertirse en una de las principales potencias en la producción de este gas cuya principal característica es que libera energía sin emitir gases contaminantes, lo que lo convierte en una de las alternativas más serias para abordar la descarbonización de la industria. Se obtiene mediante un proceso de electrolisis alimentado con energías renovables y una vez sintetizado se transporta a través de gasoductos.

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