Las aseguradoras superan el golpe de la pandemia al ingresar casi 65.000 millones en 2022, un 4,65% más

El sector asegurador español da carpetazo a la crisis del coronavirus y ya supera (por poco) los ingresos por primas que registró en 2019, año previo a la pandemia. El ejercicio pasado facturó 64.673 millones de euros, un 0,8% más que los 64.155 millones de antes de la covid y un 4,65% por encima de 2021, según el informe que ha presentado este miércoles la patronal del seguro Unespa con los datos provisionales de la Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA). Resalta asimismo la facturación de los seguros de salud, que desde la pandemia han crecido con algo más de vigor y el año pasado rebasaron por primera vez la barrera de los 10.000 millones de euros.

El avance general de las aseguradoras lo logra en este caso en un momento complicado: tiene que lidiar con el varapalo de una inflación galopante que se come su parte de su margen por la vía del incremento de sus costes. “Hemos conseguido remontar el valle que supuso la pandemia. El ejercicio, con carácter general, ha sido bueno. Hay crecimiento prácticamente en todas las áreas”, ha asegurado Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa.

De la facturación del año pasado, 40.240 millones correspondieron al ramo de no vida (+5,21%) y los otros 24.433 millones de vida (+3,74%). Entre los diferentes segmentos, los seguros de salud crecieron un 7% hasta los 10.543 millones de ingresos, dado un mayor uso de los seguros de empresas y de los particulares para sortear la saturación del sistema público. “Del 7% de crecimiento, cuatro puntos son por el incremento del número de asegurados, un punto es reflejo de la revisión de las cantidades vinculadas a Muface y los dos adicionales es el efecto inflacionario”, ha desgranado la dirigente de la patronal del sector. El mayor dinamismo por segmento el ejercicio pasado, de hecho, correspondió al ramo de salud, así como a los seguros de multirriesgos (+5,69%) y las coberturas para empresas (+5,14%). De esta última partida, la presidenta ha destacado que este viento a favor se explica por la recuperación económica del año pasado, aunque avisa de que el comportamiento será menos dinámico este ejercicio si se produce un parón de la actividad.

Por la parte del automóvil, la evolución fue igualmente favorable. A cierre del pasado diciembre, esta línea de negocio aportó 11.353 millones de euros, un 3,31% más que en 2021. “En autos, la competencia sigue siendo una característica típica del ramo. La siniestralidad se ve afectada por la inflación, en la parte de daños materiales, y por la revisión de la tabla de indemnización de daños personales, que está vinculada al índice de revisión de las pensiones públicas. De esta forma, se pone de manifiesto el esfuerzo en gestión y contención de gastos que tienen para mantener la posición competitiva de las aseguradoras”, ha enfatizado González de Frutos durante la rueda de prensa.

Por otro lado, el sector se ha anotado un retroceso en la partida del volumen del ahorro gestionado, en parte provocado por el cambio de la situación del pasivo por la escalada de los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) desde el pasado verano. Esta cantidad disminuyó en el ejercicio un 1%. Mientras que las provisiones técnicas se situaron en 193.753 millones al acabar el pasado año.

El seguro ha podido capear en parte los efectos de la espiral alcista de precios, entre otras cosas por su capacidad agregadora. “Su actividad de compra de volúmenes altos de servicios permite una mejor estabilidad de los precios que si los servicios los comprara individualmente cada uno de los asegurados”, ha añadido la dirigente de Unespa.

Relevo en la presidencia

Esta presentación de las cifras anuales del sector puede ser una de las últimas comparecencias de Pilar González de Frutos como presidenta de la patronal del seguro, ya que anunció la semana pasada que no se presentaría a la reelección. Sobre su salida, la dirigente de la patronal durante los últimos 20 años ha reconocido que se queda con la espina clavada de no haber convencido fomentar el ahorro complementario a las pensiones, así como que el supervisor español sea independiente y esté dotado de medios. “No he conseguido convencer de que el sistema de ahorro merece ser revisado y analizado con más detenimiento y menos pasión política”, ha dicho González de Frutos. Aunque no todo ha sido malo: también ha destacado la defensa que se ha hecho en estos años de las especialidades del sector frente a otros subsectores del sector financiero, así como frente a otros mercados europeos.

El relevo al frente de Unespa se producirá en los próximos meses y esto, ha enfatizado, no alterará los mecanismos de trabajo y proyectos que hay sobre la mesa con el cambio. “Los retos serán los mismos que tenía yo, que son los del sector asegurador”, ha asegurado.

La elección del nuevo presidente corresponde a los vicepresidentes de Unespa. Y el nuevo cargo relevará en principio a González de Frutos como representante del seguro en la CEOE. Lo que sí queda por ver es qué pasará con la vicepresidencia que ostenta en la organización empresarial. “Las vicepresidencias de la CEOE dependen del presidente Antonio Garamendi. Pero seguro que la colaboración intensa y extensa se va a seguir manteniendo. De esa colaboración solo han salido resultados positivos para ambas partes”, ha zanjado Pilar González de Frutos.