Las Bolsas europeas suben con timidez tras el nuevo giro fiscal en Reino Unido y la destitución de su ministro de Finanzas
Las rentabilidad del bono británico a 30 años se dispara mientras la libra cae más de un 1% frente al dólar
Los parqués del Viejo Continente han continuado este viernes el inesperado rebote comenzado la víspera tras el mal dato de inflación en Estados Unidos y han cerrado la sesión con ligeras alzas. El Ibex se ha apreciado ligeramente (+0,46%). El Euro Stoxx, que reúne a las principales empresas de la zona euro, ha subido un 0,57%. Así, los mercados han acogido con moderación el giro de guion del Reino Unido. La primera ministra, Liz Truss, ha anunciado este viernes el relevo del ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng y la reintroducción de la subida del impuesto de sociedades; todo ello en el día en el que terminaba el plan de compra de bonos del Banco de Inglaterra (BoE).
El Reino Unido aún no se recupera del terremoto provocado por la reforma fiscal anunciada —y revocada— en septiembre por su primera ministra, Liz Truss, que ya se ha cobrado su primera víctima. El cataclismo en los mercados de divisas y deuda fue tal que el BoE tuvo que intervenir con compras masivas de deuda —ya tiene en su haber más de 900.000 millones de euros en bonos del Tesoro— para evitar que sus fondos de pensiones entraran en quiebra. El plan de compras ha finalizado este viernes, a pesar de que los inversores habían presionado para que se extendiera. El giro de 90 grados en la política fiscal y la sustitución del ministro de Finanzas no han sido acogidos con euforia por los inversores: la libra esterlina, que se ha depreciado casi un 17% este año, baja más un 1%. La rentabilidad de los bonos a 30 años —los favoritos de los fondos de pensiones—, que ha caído a lo largo de la mañana, se ha disparado hasta el 4,83%, y se acerca al máximo en 20 años que marcó el miércoles. El FTSE, índice de referencia en Londres, solo ha subido un tímido 0,19%.
Los mercados rebotaron el jueves tras un mal dato de inflación en Estados Unidos, y este inesperado giro alcista ha continuado el viernes en los parqués del Viejo Continente. El DAX alemán (+0,67%), el CAC francés (+0,9%) y el MIB italiano (+0,69) han cerrado la última sesión de la semana en verde. En España, el Ibex ha avanzado ligeramente, sostenido por las energéticas. Los valores que mejor se han comportado son Naturgy Energy (+4,10%), Endesa (3,33%) y Enagás (+2,97%). En el lado contrario de la tabla, Fluidra se ha depreciado un 4,10%. Grandes valores como Inditex y Arcelor Mittal también han marcado perdidas y han lastrado la pequeña subida del selectivo español.
Todo sigue igual en el mercado de divisas: el dólar se mantiene fuerte, espoleado por las subidas de tipos agresivas de la Reserva Federal y por los precios de la energía (los contratos energéticos se pagan en dólares). El euro ha seguido su tendencia frente al billete verde y, a la hora de cierre de las bolsas europeas, bajaba un 0,5%: el dólar se paga a 0,97 euros. En lo que va de año, la divisa comunitaria se ha depreciado más de un 15% frente a la moneda estadounidense.
En cuanto a la deuda, la rentabilidad del bono español a 10 años ha bajado un 0,3%, y se pagaba sobre las 18.00 a un interés del 3,5%. La prima de riesgo ha mejorado y se ha situado en los 116 puntos, dos menos que este jueves. En materias primas, el petróleo ha caído con fuerza. El precio del brent (el crudo de referencia en Europa) ha bajado cerca del 3% y el barril ronda los 92 dólares (91,87). El (WTI), referencia en EE UU, le ha seguido la pista y, al cierre de los parqués del Viejo Continente, el barril se depreciaba alrededor del 3,5%, hasta los 86 dólares.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.