Datos | El Gobierno y los diputados se han subido el sueldo. ¿Cobran mucho o poco? ¿Más que en Francia o Italia? ¿Y comparado con un alcalde?

Los sueldos de los políticos son artillería habitual en sus debates. Estos días han sido un buen ejemplo: la presidenta de la Comunidad de Madrid criticó en Twitter al Ejecutivo central por aumentar su remuneración para 2023 un 4%. Varios usuarios no tardaron en recordar a Isabel Díaz Ayuso que cobra 103.090 euros brutos al año, 16.500 euros más que Pedro Sánchez.

Pero, ¿realmente son altos los salarios de los políticos? Son elevados si los comparamos con el salario medio en España, 25.165 euros brutos al año, según las últimas cifras de la Encuesta Anual de Estructura Salarial que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE). Un ministro cobra en 2022 en torno al triple (76.355). Una comparación más afinada, respecto a los salarios de estos cargos en otros países, muestra que España no está entre los que más pagan.

Una buena vara de medir es el sueldo del jefe del Gobierno. Pedro Sánchez cobrará 86.542 euros brutos este año (90.010 en 2023), menos de la mitad que el presidente de Francia, Emmanuel Macron (182.400). Se podría argumentar que el nivel de renta en Francia es superior al de España, pero el desfase no es tan alto como indican los sueldos de los principales responsables políticos de cada país. Macron cobra un 110% más que Sánchez, mientras que el salario medio francés es un 56% superior. El presidente español también cobra ligeramente menos que el primer ministro de Portugal, António Costa, en cuyo país el salario medio es menor que en España (20.602 brutos al año, unos 4.000 euros menos). Sánchez está lejísimos de los jefes de Gobierno de algunas de las democracias que mejor pagan en el mundo, como Suiza (469.480 euros brutos al año) o Estados Unidos (411.618).

El sueldo de los diputados españoles también es inferior al de sus homólogos europeos. Un parlamentario del Congreso cuya circunscripción no sea Madrid cobra unos 70.143 euros (cifra que aumentará un 3,5% en 2023), casi tres veces menos que los diputados italianos y casi la mitad que los alemanes. Un informe interno del Centro Europeo de Investigación y Documentación Parlamentarias que adelantó El Periódico de España, que compara los salarios de los diputados de varios países miembros de la Unión Europea en 2019, indica que España es el cuarto país por la cola. Solo Polonia, Croacia y Letonia retribuyen peor a sus parlamentarios. Un análisis de Euronews en 2016, que recoge estadísticas de todos los socios comunitarios, señala que solo los países con un nivel de renta sensiblemente inferior al de España, como Rumania o Bulgaria, pagaban entonces peor a sus diputados.

Entre los sueldos políticos más altos del país están los de algunos alcaldes. Destaca el del regidor de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que ingresa 108.517 euros brutos al año, ligeramente más que la regidora de París (103.800) y 40.000 más que el de Lisboa (62.688). A diferencia de lo que sucede en Francia o Portugal, el sueldo del alcalde de la capital española es superior al del presidente del Gobierno central.

Entre las 15 ciudades más pobladas de España también ingresan más que Sánchez el alcalde de Valladolid, Óscar Puente (87.595); el de Valencia, Joan Ribó (88.880); el de Bilbao, Juan Mari Aburto (99.978), y la de Barcelona, Ada Colau (100.000). Aunque la regidora catalana precisa que renuncia a las dietas y dona 25.600 euros al año a proyectos sociales cuyo destino decide su partido.

La Ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local, aprobada por el PP en 2013, relaciona la retribución máxima posible de los alcaldes con la población del municipio. Desde entonces, los primeros ediles de ciudades de más de 500.000 habitantes pueden cobrar, como mucho, lo mismo que un secretario de Estado. Cuanta menos población, menor es ese salario máximo.

No hay una norma similar para los presidentes de las comunidades autónomas. La retribución más alta es la del presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès: 132.855 euros brutos al año. También cobran más que Sánchez el lehendakari Iñigo Urkullu (106.778), la madrileña Ayuso (103.090) y el aragonés Javier Lambán (89.602). Los que menos cobran son la balear Francina Armengol (70.466), el andaluz Juan Manuel Moreno (69.243) y el cántabro Miguel Ángel Revilla (63.338), que percibe menos de la mitad que Aragonès.

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado especifica otros sueldos públicos que superan a los del Ejecutivo central. El presidente del Tribunal Constitucional tiene asignado un salario de 160.728 euros brutos en 2022, que ascenderán a 167.169 en 2023. Ahora ostenta el cargo Pedro José González-Trevijano. Entre los puestos de más alta responsabilidad de la judicatura, le sigue el presidente del Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (posición a la que acaba de renunciar Carlos Lesmes), con 145.361 euros al año. La retribución de este puesto se incrementará un 4% el año que viene, al igual que la de la presidenta del Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano (de 125.733 euros en 2022).

Todos estos sueldos son menores que el de Felipe VI, que ingresará 258.927 euros brutos este año, el triple que el presidente del Gobierno.