Rodríguez-Ponga se suma a los otros presos de las tarjetas ‘black’ que disfrutan de la semilibertad

El exsecretario de Estado de Hacienda con el PP y exvicepresidente de Caja Madrid, Estanislao Rodríguez-Ponga, uno de los 15 condenados por el escándalo de las tarjetas black que tuvieron que ingresar en prisión, accedió el pasado 9 de septiembre al tercer grado penitenciario o semilibertad, según han confirmado a EL PAÍS fuentes jurídicas y penitenciarias. Rodríguez-Ponga, condenado a tres años y dos meses por malgastar 255.373 euros con la tarjeta de crédito de la entidad financiera, había ingresado en el Centro Penitenciario Madrid V, en la localidad madrileña de Soto del Real, en octubre del año pasado tras hacer firme su condena el Tribunal Supremo. El pasado 2 de septiembre, siete días antes que él, también había conseguido el régimen abierto Francisco Baquero, exconsejero de la entidad por CC OO y con la misma condena.

Ambos se suman así a los otros 11 reclusos del caso de las tarjetas black que accedieron al tercer grado el pasado verano. En la actualidad solo permanecen en el régimen ordinario de prisión el que fuera vicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato —condenado a cuatro años y seis meses de prisión, y recientemente juzgado por el caso Bankia— y el exconsejero de la entidad financiera a propuesta de IU José Antonio Moral Santín, con una pena de cuatro años. Ambos permanecen recluidos en misma cárcel en la que hasta hace unas semanas estaba el ex secretario de Estado.

Rodríguez-Ponga y Baquero han accedido al régimen de abierto después de que la Junta de Tratamiento —el órgano interno de las cárceles encargado de clasificar a los reclusos— hiciera una propuesta en este sentido y la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias lo aprobase. En ambos casos, Prisiones ha tenido en cuenta que habían cumplido una cuarta parte de la pena impuesta y habían devuelto las cantidades gastadas En ambos casos se les ha aplicado el artículo 82.1 del Régimen Penitenciario que determina las condiciones del llamado "régimen abierto restringido". Este incluye "controles y medios de tutela" sobre los reclusos en sus salidas al exterior.

De este modo, los dos exconsejeros de la entidad financiera han pasado a depender de Centros de Inserción Social (CIS), establecimientos dependientes de Instituciones Penitenciarias destinados a reclusos que cumplen condena en semilibertad y a los que únicamente tendrán que acudir a dormir de lunes a jueves, siempre y cuando justifiquen tener un trabajo remunerado en el exterior. Su clasificación en tercer grado también les permite solicitar permisos de salida de hasta siete días de duración, que podrán sumar 48 días en total en un año.

El pasado mes de julio, cuando se cumplían nueve meses de su ingreso en prisión, ya habían accedido al régimen abierto José María de la Riva, Ángel Eugenio Gómez del Pulgar (ambos consejeros de Caja Madrid y Bankia a propuesta del PSOE), Rubén Cruz Orive (IU) y los sindicalistas de UGT Gonzalo Martín Pascual y Miguel Ángel Abejón. Todos ellos habían sido condenados a penas que iban de los tres años a los dos años y seis meses. En los primeros días de agosto siguieron sus pasos otros seis: Rodolfo Benito, Antonio del Rey (ambos de CC OO), Javier de Miguel Sánchez (PP), Francisco José Pérez Fernández, Jorge Gómez Moreno y Antonio Romero Lázaro (los tres del PSOE).