Siete consejos (básicos) para frenar tus gastos de la vuelta al cole
Los libros de texto, la ropa y el material escolar son las principales compras en estas fechas. Y teniendo en cuenta una serie de recomendaciones es fácil ahorrarse unos euros
Septiembre es el primo hermano de enero en lo que a finanzas personales se refiere. Ambos meses son momentos en los que muchos echan cuentas para ajustar su economía. Enero deja más de un bolsillo con algún roto debido a los gastos de las fiestas navideñas, y septiembre no solo es el mes tras los gastos vacacionales, sino que también es en el que se afronta el desembolso de la vuelta al cole.
Los libros, la ropa y el material escolar se llevan la mayoría del gasto que requiere el comienzo de las clases. El precio medio de los libros varía según el curso escolar y el tipo de centro en el que se matricule al alumno (público, concertado o privado). La ropa también tendrá costes diferentes en función de si se usa uniforme o no. Entre tantas variantes que influyen directamente en la vuelta al cole, lo mejor es aplicar consejos generales que pueden ayudar a ahorrar en distintas situaciones.
Planificar: es un consejo muy manido en lo que a temas de finanzas personales se refiere, pero no por ello es menos importante. Antes de empezar a comprar bolígrafos, zapatillas o libretas, sentarse un minuto a hacer una lista con todo lo que lo necesario puede hacer que ahorres unos cuantos euros. Hará que compres solo lo indispensable y así no habrá ningún gasto de más en productos innecesarios.
Comparar precios: los libros de cada centro suponen un coste fijo ya que toda la clase debe tener el mismo y las editoriales lanzan una versión de cada ejemplar. En esta partida no se puede abaratar el coste si se opta por libros nuevos. El caso del material sí nos permite conseguir un ahorro si comparamos precios. Hay bastantes diferencias entre unas librerías a otras y tampoco hay que olvidar las ofertas online. Antes de comprar las libretas, los bolígrafos o la mochila merece la pena comparar precios. Un consejo que también se puede aplicar a la compra de la ropa, ya que de unos establecimientos a otros o de unas marcas a otras hay bastantes diferencias en el coste.
Buscar ofertas: muchos establecimientos aprovechan la vuelta al cole para lanzar ofertas que atraigan clientes. Estar atento a estas promociones ayudará a ahorrar. La precaución que sí hay que tener es no dejarse llevar por ofertas si no necesitamos el producto que se abarata o si la cantidad es excesiva.
Definir tiempos de compra: las clases empiezan a principios de septiembre en todas las comunidades autónomas y, aunque el grueso del gasto es inevitable hacerlo ahora, seguro que se puede retrasar alguna compra para otros meses. Tal vez no necesitemos todas las libretas en septiembre o si dejamos esas zapatillas para más adelante.
Reciclar: al lado de la lista de imprescindibles podemos añadir otra que contenga todo aquello que podemos aprovechar del año anterior o de un hermano. Empezar el colegio estrenando material, libros o ropa puede compaginarse con aquello que todavía se puede utilizar.
Compras de segunda mano: el mercado de segunda mano supone abaratar el coste de la vuelta al cole. Es especialmente recurrente en el caso de los libros que están en buen estado. Hay incluso asociaciones de padres en diversos colegios que fomentan la compraventa de algunos ejemplares de segunda mano. Este tipo de iniciativas abaratan su precio considerablemente. Otra opción es heredar libros o prendas de hermanos, familiares o amigos. La ropa de los más pequeños suele quedarse corta con rapidez y, en muchos casos, aún presenta un buen estado. Que la siga utilizando un niño más pequeño es una gran opción para sacarle el máximo partido a esas prendas.
Usar las bibliotecas públicas: este hábito nos ahorrará el coste de los libros que tengan que leer los alumnos a lo largo del curso. Es un gasto que se podría espaciar en función de como avance el curso, así que no influiría directamente en el coste inicial.
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