_
_
_
_
_

Renuncia la presidenta de Aerolíneas Argentinas

Isela Costantini es la primera salida del equipo de gobierno de Mauricio Macri

Federico Rivas Molina
La expresidenta de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini, durante una entrevista en Buenos Aires, el 8 de agosto pasado.
La expresidenta de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini, durante una entrevista en Buenos Aires, el 8 de agosto pasado.Reuters
Más información
Aerolíneas Argentinas reduce a la mitad su déficit operativo

El presidente Mauricio Macri ha perdido a una pieza importante de su Gobierno. La presidenta de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini, renunció en forma sorpresiva a su cargo por “motivos personales”, según confirmaron a EL PAÍS fuentes del ministerio de Transporte. La ejecutiva, ex CEO de General Motors Argentina, fue en enero de 2016 uno de los nombramientos estrella del nuevo equipo presidencial, un fichaje de perfil técnico con la misión de “despolitizar” la dirección de la aerolínea de bandera, una de las empresas que fueron emblema del nacionalismo económico impulsado por el kirchnerismo. Macri ha elegido para suceder a Costantini al empresario Mario Agustín Dell'Acqua, exdirector de Proyectos de Techint, una acería multinacional de capitales argentinos e italianos, y hasta ahora al frente de Intercargo, la operadora estatal de los servicios aeroportuarios.

Si bien la salida de Costantini no será inmediata, por el deseo de la ejecutiva de garantizar una transición ordenada, la renuncia ha sido sorpresiva y significa una baja de alto impacto para el Gobierno. Hace menos de un mes, Costantini envió una carta a todo el personal donde no daba indicios de un fin de ciclo sino de todo lo contrario. "Tenemos menos de un mes por delante para cerrar un año con muy buenos resultados. Tenemos proyecciones de un diciembre y enero récord de pasajeros, así que les pido trabajo en equipo para poder entrar en nuestra temporada alta de verano con toda la fuerza, consistentes en puntualidad y con el foco puesto en el pasajero", escribió.

Costantini nació en São Paulo hace 44 años de padres argentinos. Su nombramiento al frente de Aerolíneas Argentinas fue leído como el intento de Macri por profesionalizar la empresa tras una década de administración kirchnerista marcada, según el nuevo Gobierno, por el alto perfil político de su dirección. “Durante su gestión, Costantini estuvo enfocada fuertemente en la reducción del déficit del Grupo, la consolidación de las rutas y de la operación, el refinanciamiento de contratos de renovación de flota y el fuerte foco en el servicio, con records históricos de puntualidad, entre otros logros”, informó el ministerio de Transporte, que confirmó la renuncia de la ejecutiva en un breve comunicado. Dell’Acqua tendrá la misión de continuar con esa tarea.

Propiedad de la española Marsans, Aerolíneas pasó al Estado argentino al borde de la quiebra. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner nacionalizó la empresa en 2008 y heredó un déficit anual de 900 millones de dólares, según cifras difundidas por Mariano Recalde, antecesor de Costantini en la presidencia. El lunes, Aerolíneas anunció que el promedio de déficit operativo de ocho años de gestión kirchernista fue de 678 millones de dólares y que al cierre de 2016 había logrado reducirlo a 300 millones. “Lo primero que nos encontramos hace un año fue que si Aerolíneas quería honrar todas sus deudas hubiésemos necesitado [subsidios del Estado por] 1.000 millones de dólares. Pero estando a días de cerrar el año puedo asegurar que vamos a pedir sólo 300 millones de dólares de subsidio. Es decir que de costar 2 millones por día ahora la empresa cuesta al Estado menos de 1 millón por día”, dijo Pablo Miedziak, director del área financiera del Grupo Aerolíneas. El directivo recibió a la prensa en el Aeroparque de Buenos Aires para anunciar la compra de 20 aeronaves de cabotaje, entre ellas once 737 MAX 8, un nuevo producto de Boeing que volará a partir de mayo próximo.

Convertir a Aerolíneas en una empresa “sustentable” fue el gran desafío de Costantini. De ahí la trascendencia de la reducción del déficit anunciada. Sin embargo, las cifras fueron refutadas por el expresidente Recalde. “El déficit que dejaron las gestiones privadas se fue reduciendo paulatinamente y en forma ininterrumpida desde 2008 (a excepción del año 2011), llegando el año pasado a ser de 180 millones de dólares, cifra bastante cercana a la informada por la propia gestión”, dijo Recalde en un comunicado. Para el exdirectivo, “distintos funcionarios de Aerolíneas indicaron que el déficit sería entre 300 millones de dólares y 450 millones de dólares. Es decir que el déficit no sólo no se redujo sino que por lo menos se duplicó este año”.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Federico Rivas Molina
Es corresponsal de EL PAÍS en Argentina desde 2016. Fue editor de la edición América. Es licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Buenos Aires y máster en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_