Repsol inaugura en Perú una refinería de diésel bajo en azufre
La compañía y el Gobierno esperan que fomente la modernización del parque móvil peruano
La petrolera Repsol inauguró ayer la unidad de producción de diésel bajo en azufre de su refinería peruana de La Pampilla, en Perú, cuya inversión ha ascendido a unos 470 millones de dólares (unos 430 millones de euros). El acto de inauguración contó con el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, y con el presidente de Repsol, Antonio Brufau, y el consejero delegado de la compañía española, Josu Jon Imaz, según informó la petrolera. Esta nueva unidad permite la producción de combustibles de menos de 50 partes por millón de azufre.
La puesta en producción de esta unidad es un importante hito para Perú, al producirse diésel en el país para motores Euro IV, y fomentará la modernización del parque móvil peruano. La Pampilla se convierte así en la primera refinería en el país sudamericano en contar con instalaciones ambientales de este tipo y en una de las más avanzadas de la zona.
Esta prevista una segunda fase para la producción de gasolinas de bajo contenido en azufre, cuya puesta en servicio tendría lugar en el segundo semestre de 2018 y representa una inversión adicional de unos 270 millones de dólares (unos 246 millones de euros).
Brufau destacó que la nueva sección evitará la emisión a la atmósfera de 100 toneladas de dióxido de azufre diarias y al mismo tiempo producirá alrededor de 40 toneladas de azufre al día. Kuczynski recordó que el diésel es el principal combustible utilizado por el transporte comercial en Perú y afirmó que en los próximos años habrá instalaciones similares en la refinería de Talara.
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