Ninguna región española entre las 20 más ricas de la UE

España sigue sin colocar a ninguna región entre las 20 más ricas de la Unión Europea (UE), según los datos hechos públicos este viernes por Eurostat, la agencia estadística comunitaria. La comunidad autónoma con mayor renta per cápita, Madrid, cerró 2014 —el último año del que hay cifras disponibles— con una riqueza por habitante de 30.700 euros, un 25% por encima de la media comunitaria, frente a los 172.600 euros del oeste de Londres, la región más rica de Europa con una renta que multiplica por más de cinco la media comunitaria, o los 46.000 euros del sur y del este de Irlanda, que cierra la tabla de la veintena de regiones más acaudaladas. Las regiones más ricas están situadas en países del norte de la UE, con las únicas excepciones de Île de France y Praga (República Checa).

Tres comunidades españolas —País Vasco (con el 119% de la renta media europea), Navarra (113%) y Cataluña (108%), además de Madrid— están por encima de la renta media de la Unión y otras dos —La Rioja y Aragón— se sitúan justo en la media comunitaria. Un año antes, en 2013, España había colocado a seis regiones por encima de la media comunitaria.

Peor que un año antes

En el lado contrario, cinco autonomías o ciudades autónomas —Extremadura (con el 63% de la renta media europea), Andalucía (67%), Melilla (68%), Castilla-La Mancha (72%) y Murcia— se quedaron más de un 25% por debajo de la media. Estas regiones siguen muy por encima de las regiones más pobres de Europa, en su mayoría situadas en países del Este. En 2013, en cambio, solo tres —Extremadura, Andalucía y Melilla— cerraron por debajo de este baremo, por lo que los resultados presentados este viernes son sustancialmente peores a los registrados un año antes. El resto de comunidades o ciudades autónomas se situaron en una horquilla que va desde el 96% de Islas Baleares hasta el 76% de Ceuta.

La renta por habitante española en paridad del poder adquisitivo se mantuvo en los 25.000 euros. Esta cifra es un 9% inferior a la media comunitaria, mientras que un año antes esta cifra era un 6% más baja que la media continental.