El dólar alcanza un máximo histórico frente al peso mexicano
La depreciación de la moneda mexicana une su destino a una crisis del petróleo que podría prolongarse durante varios meses
El peso mexicano atraviesa una tempestad que ha depreciado su valor frente al dólar estadounidense. Este viernes la moneda se ha situado en 17,65 pesos por dólar en ventanilla, 15 centavos menos que el cierre del jueves, cuando perdió un 0,78% de su valor en un solo día. La marejada en el tipo de cambio se ha desatado tras la caída del precio del petróleo resultado de la falta de acuerdos en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para establecer un techo máximo de producción.
La OPEP se reunió el pasado viernes en Viena para discutir la recuperación del precios del crudo, sin embargo la organización no consiguió fijar un límite de producción ante el exceso de oferta de este producto. México, como país productor de petróleo, ha resentido la decisión y la mezcla mexicana de exportación se ha situado en 29,04 dólares por barril, uno de los precios más bajos de su historia.
Por otro lado está la expectativa ante el anuncio de la Reserva Federal (Fed) del próximo 16 de diciembre sobre el alza de los tipos de interés. Una noticia que ha tenido en vilo al Banco de México desde la mitad del 2015 y que ha causado inquietud en los mercados. “Más que la decisión de la Fed, el determinante esta vez ha sido la presión del petróleo y la expectativa de que los precios pueden permanecer bajos por un tiempo”, explica Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer.
La mezcla mexicana de exportación se ha situado en 29,04 dólares por barril, uno de los precios más bajos de su historia
Serrano asegura que la Fed ha comunicado su intención de subir los tipos con antelación, lo que ha calmado los ánimos en los mercados. El BBVA Bancomer estima que si la Fed se decide por subir los tipos de interés, el Banco de México hará lo mismo al día siguiente. “El tipo de cambio dependerá no tanto de la subida de tipos, nosotros pensamos que los mercados ya han mayoritariamente incorporado esta subida y eso no tendría que resultar en depreciaciones”, apunta el economista.
La moneda mexicana ha sufrido una importante depreciación durante todo el año. En un primer plano fue consecuencia de la recuperación de la economía de Estados Unidos y el fortalecimiento de su dólar. Más tarde, la incertidumbre por la subida de tipos de la Fed metió más presión al peso mexicano. Aunque el mercado internacional del petróleo ha estado a la baja durante más de un año, los niveles de los precios del crudo no habían llegado a niveles tan bajos como los de ahora.
El Banco de México decidió en julio introducir un mecanismo de subasta de dólares para frenar la caída de la moneda. El banco central fijó entonces pujas por hasta 200 millones de dólares diarios, una medida que ha sido criticada por el Fondo Monetario Internacional (FMI). “Aunque el FMI reconoce que la intervención temporal en el tipo de cambio ha ayudado a mantener la liquidez del mercado y ha reducido la volatilidad, la organización alienta a las autoridades a limitar el uso de reservas internacionales para períodos de desorden en los mercados y a recuperarlas tan pronto las presiones desistan”, señaló la organización en su informe del 9 de noviembre sobre México.
El mecanismo de subastas del Banco de México provocó la caída de las reservas internacionales de México, por lo que el sistema fue reestructurado para establecer mejores condiciones para la venta de dólares en México. “El nuevo mecanismo permite inyectar hasta 400 millones de dólares diarios pero es distinto porque se inyectan 200 millones de dólares si la moneda se deprecia 1% y otros 200 si se deprecia más de 1,5%. Hay días en los que no se subasta ni un dólar”, expone Serrano.
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