BBVA pide más ajustes para tapar el agujero de las pensiones

La economía española se ralentizará ligeramente durante el último trimestre del año, según pronostica BBVA Research, el centro de estudios del banco, en el informe Situación España difundido este martes. La entidad augura que la actividad económica progresará durante el próximo año un 2,7% del PIB, un cálculo menos optimista que lo previsto por el Gobierno. El estudio también anticipa que en 2018 aún habrá un desfase presupuestario de 15.000 millones, y propone, entre otras medidas, “ir hacia un mayor uso de los mecanismos de copago”.

El último trimestre de este año la economía española sufrirá una ligera desaceleración por el aumento de las incertidumbres sobre el crecimiento global, el agotamiento de algunos impulsos y el aplazamiento de algunas decisiones de gasto por las elecciones, según el informe del BBVA Research. La entidad pronostica un progreso del PIB del 0,7% en el cuarto trimestre para dejar el crecimiento anual en el 3,2%, una décima menos de la previsión oficial.

El economista jefe de Economías Desarrolladas del centro de análisis, Rafael Domenech, considera que en los trimestres anteriores había “una demanda embalsada de bienes duraderos”, lo que, a su juicio, ha favorecido el consumo interno. Prueba de ello, apunta, es el dato de matriculación de coches que ha crecido más de lo esperado.

Abunda en que los vientos de cola sobre los que cabalgaba la economía durante la pasada primavera se están atenuando. Entonces, el abaratamiento del precio del petróleo, la depreciación del euro y la política expansiva del BCE impulsaron la economía española a un ritmo desconocido desde antes de la crisis. Ahora algunos de esos efectos ya se han descontado y no tienen tanta influencia sobre la actividad.

Por eso, las perspectivas del BBVA para el próximo año, al igual que las de Bruselas o la OCDE , son más prudentes que las estimadas por el Gobierno. El centro de estudios de la entidad financiera espera que la economía avance a un ritmo del 2,7% una tasa inferior a la oficial (3%). Pese a todo, los expertos se mostraron optimistas y recurrieron al concepto de “la divina coincidencia: la virtuosa trinidad de crecimiento, baja inflación menor que el resto de Europa y desapalancamiento frente al resto del mundo”.

Pero también observan nubarrones en el medio plazo. El borrón, según los expertos del banco, está en las cuentas de la Seguridad Social. “Uno de los principales riesgos que vemos es el desfase en las cuentas de la Seguridad Social”, admitió Domenech, que advierte de que la partida para pagar las pensiones crece más rápido de lo presupuestado. Por eso, consideran que los esfuerzos para reducir el gasto público no compensarán el aumento en la Seguridad Social. Domenech advirtió de que “la recuperación no será suficiente para eliminar el déficit. Hay un riesgo significativo de incumplimiento del déficit en 2018, que se situará en el 1,5% del PIB”, el equivalente a unos 15.000 millones.

Más copagos

¿Cuál es la solución para atajar este desfase? “Lo que más nos interesa, la primera opción, serían aquellas medidas encaminadas a reducir la tasa de desempleo como fórmula para cuadrar las cuentas públicas”, indicó el economista, que calcula que una disminución del desempleo de cuatro puntos porcentuales mejoraría el saldo presupuestario en tres puntos.

Domenech, en un artículo incluido en el informe, recomienda aumentar los ingresos tributarios mediante la ampliación de las bases imponibles pero manteniendo los tipos de gravamen lo más bajos posibles, “quizá eliminando el sistema de módulos”. El experto desliza la conveniencia de aumentar el peso de la tributación indirecta: “Una posibilidad atractiva sería la de elevar el tipo medio de los impuestos indirectos, por ejemplo, mediante un aumento de los impuestos medioambientales y una reducción del número de productos que pagan los tipos reducidos de IVA”.

Pero los expertos también recomiendan “ir hacia un mayor uso de mecanismos de copago (especialmente en sanidad y universidades pero también en infraestructuras y transportes), bien diseñados para que nadie pueda quedar excluido en razón de su nivel de renta”.