Accenture analiza la viabilidad industrial de la Fábrica de la Moneda
El encargo procede del Banco de España y de la propia empresa de billetes
La legislación europea está en un profundo proceso de cambio sobre la producción de billetes de euro. El Banco Central Europeo (BCE) quiere revisar el actual modelo de producción, lo que afectará de lleno a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT) e, incluso, al Banco de España que puede convertirse en el nuevo fabricante de billetes.
Ante este confuso panorama, el organismo dirigido por Luis Linde y la propia Fábrica, cuyo director general es Jaime Sánchez Revenga, han encargado a la consultora Accenture “un estudio industrial de viabilidad que analice la organización de la planta y la producción de billetes”, según fuentes conocedoras de la operación.
La Fábrica, además de los billetes y monedas, produce sellos, quinielas, pasaportes, DNI, cartones de bingo y otros juegos, etiquetas de seguridad, precintos fiscales, tarjetas de crédito, tarjetas de firma electrónica, carnés de conducir, etc.
La entidad ganó 16,7 millones en 2013, un 15% menos que el año anterior
Los responsables de la multinacional Accenture llevan unos días entrevistándose con diferentes responsables de la FNMT, como el jefe de Seguridad (uno de los aspectos clave en la producción de billetes), el de Recursos Humanos y responsables de control de producción de los documentos de valor, según fuentes sindicales de UGT.
Estas reuniones han levantado suspicacias entre algunos trabajadores que consideran que la información que está obteniendo Accenture “es confidencial y representa las claves de funcionamiento de la Fábrica”, según estas mismas fuentes.
Algunos se preguntan por los contratos de confidencialidad que pueda tener Accenture, pero recuerdan que la fabricación de billetes es un negocio en el que hay pocos jugadores en Europa y puede ser un problema que los competidores acaben conociendo los detalles internos de la producción de la Fábrica de Moneda.
Los sindicatos creen que el supervisor puede “expropiar” el negocio de la FNMT
Con toda esta revuelta situación, el comité de empresa de la FNMT se entrevistó el lunes con Pilar Platero, subsecretaria del Ministerio de Hacienda, dueña de la Fábrica Nacional.
El comité le planteó que según los informes jurídicos que poseen, tras conocer “el proyecto de nueva orientación a aplicar en el abastecimiento de billetes euro, la nueva normativa no impide” que el Banco de España tome el control y la gestión de la producción de billetes, mientras la producción industrial quede en manos de los responsables de la FNMT.
Los sindicatos plantearon a Platero que su objetivo es que “el cambio de modelo actual, no obligue al desmantelamiento de la actividad industrial actual de la Fábrica”. También reclamaron a Luis Linde que muestre el éxito del proyecto europeo para conocer sus detalles.
El comité considera que si el supervisor “opta por la segregación sin paliativos de la actividad del billete euro en la FNMT a través de una Sociedad pantalla, se iniciará un proceso de caída de la FNMT hacia su fin como institución señera en la seguridad de los productos oficiales”.
Afirman que “las razones del Banco de España para aplicar su modelo no responden a ninguna obligación legal. Su modelo expropiatorio de la actividad de la FNMT en billetes y rupturista con el de producción de papel para billetes, pues expulsa del modelo actual a Burgos, que es Fábrica de papel moneda, por mucho que se quiera disfrazar la realidad”.
Estas fuentes afirman que el Banco de Francia realiza tanto la impresión como la producción de papel. También sostienen que la Fábrica es competitiva en precios y sus trabajos gozan de reputación tecnológica.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.