El bono español a 10 años cae del 3% y toca su nivel más bajo de la historia
La rentabilidad exigida a la deuda del Tesoro toca el 2,971% y cierra en el 2,976% La prima de riesgo se reduce a 153 puntos básicos, mínimos desde 2010
El interés exigido al bono español a 10 años ha caído este viernes al 2,97% por primera vez en la historia y ha logrado acabar la jornada por debajo del 3%, algo que tampoco había sucedido nunca desde que hay datos sobre la evolución de la deuda del Tesoro en los mercados secundarios. El origen de la mejora está en que los inversores ven cada vez más lejos la crisis del euro, confían en que el BCE no permitirá que los problemas vuelvan y en que regresa la confianza en España, que lleva meses beneficiándose de esta recuperación. Dentro de esta tendencia, además, acaba de recibir el respaldo de dos de las tres grandes agencias de calificación, que la han ascendido en la lista de notas de solvencia.
Al cierre de este viernes, festivo en Madrid, el interés al que se han intercambiado los bonos a 10 años en el mercado secundario, que es donde se negocian los títulos del Tesoro una vez emitidos, ha bajado al 2,976%. Durante la víspera, día de cierre en toda España y buena parte de Europa por el Primero de Mayo, también llegaron a ofertarse por debajo del 3%, pero estas operaciones no fueron significativas.
Según las referencias de Bloomberg, el bono a 10 años, que es el que se usa para calcular la prima de riesgo sobre Alemania, solo había estado hasta ahora por debajo del 3% en una ocasión: El 21 de septiembre de 2005, cuando llegó a marcar un 2,981%. Al final del día, sin embargo, acabó la sesión en el 3,005%, que es el dato que queda en los registros, unos archivos donde ahora queda para la posteridad el récord del 2,976%.
Independientemente de las centésimas, lo cierto es que los bajos intereses reclamados para comprar el papel del Estado suponen la señal más clara de que España ha dejado atrás la crisis de deuda. En el camino, no obstante, ha aumentado el total del pasivo a cotas desconocidas, ha aprobado duros recortes sobre el Estado de Bienestar y ha forzado una devaluación interna apostando por la rebaja de los salarios. En lo peor de las turbulencias, verano de 2012 y cuando se temía en una ruptura del euro, la rentabilidad exigida por los bonos a 10 años del Tesoro llegó a superar el 7,6%, su peor dato de toda la era euro.
Sin embargo, casi dos años después, algunos de los bonos de España como los títulos a 5 ó 7 años cotizan mejor que sus iguales estadounidenses —un 1,669% y un 2,261% frente a un 1,671% y un 2,223%, respectivamente—. Aunque con matices, ya que en esta mejora también han tenido mucho que ver la fuerte cotización del euro frente al dólar y las perspectivas de una baja inflación en toda Europa.
Para el Estado, la principal consecuencia de la recuperación es que el descenso de intereses logrado en el secundario acaba por trasladarse a las emisiones que realiza el Tesoro. Este hecho abarata los costes de financiación, algo esencial con vistas a soportar el elevado volumen de deuda alcanzado a lo largo de la crisis. En 2013 ya se ahorró 8.500 frente a los 38.600 millones presupuestados y, con vistas a 2014, espera en dejar de gastarse otros 5.000 millones con respecto a los 36.600 millones previstos.
En cuanto a la prima de riesgo, el sobreprecio exigido a la deuda española frente a la alemana apenas se ha movido con respecto a sus niveles de las jornadas previas. Al final del día estaba en 153 puntos básicos (1,53 puntos porcentuales) tras reducirse a 152 puntos antes de la apertura de la Bolsa. Es su nivel más bajo también desde julio de 2010.
En cuanto a la renta variable, la Bolsa española ha encaminado las subidas tras superar los titubeos de primera hora gracias a la mejora de la deuda. Al final, el selectivo español ha subido un 0,15%, hasta rozar los 10.500 puntos. En el resto de Europa, sin embargo, las compras no han sido suficiente para contrarrestrar las ventas y, al acabar el día, Fráncfort ha caído un 0,49%, París se ha dejado un 0,65% y Milán, un 0,01%. Londres, por su parte, ha acabado subiendo un 0,20%.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.