El Círculo de Empresarios pide rebajar el salario mínimo a personas sin formación
"Hay que dar trato desigual a formación desigual", afirma su presidenta, porque considera que muchos empleados "no valen lo que cuestan"
La presidenta del Círculo de Empresarios, Mónica Oriol, ha planteado este jueves rebajar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a las personas que no tienen formación y ha justificado esta petición en que "hay que dar trato desigual a formación desigual".
En un encuentro informativo organizado en el Club internacional de Prensa, De Oriol criticó que el salario mínimo "te obliga a pagar un sueldo a estos jóvenes aunque no valgan nada". "Hay que darles un dinero que no producen", denunció. Por esta razón, sostuvo que es necesario "dar a gente desigual un trato desigual", de manera que el SMI solo se aplique a los trabajadores con una "cierta formación". Así, no se aplicaría el salario mínimo "hasta que no produzcan lo que cuestan".
Oriol ha dicho que se trata de "sacar a los nini (jóvenes que ni estudian ni trabajan) del limbo en el que viven", pero además ha apostado por "una segunda reforma laboral" que aproxime el coste de despido a la media europea, que está en 18 días por año trabajado. El salario mínimo ronda actualmente los 650 euros.
En este sentido, Oriol ha lamentado que la reforma laboral de 2012 haya bajado el coste solo de 45 a 33 días ya que una vez que se hace una reforma se debería haber apostado por "colocar a España a la cabeza, no seguir dejándola a la cola de Europa". Sobre el salario mínimo, Oriol ha abogado por que "solo se aplique a partir de que se tenga cualificación o se haya hecho formación dual".
“Como ganamos más que ellos [los políticos], no les gustamos”, afirma Mónica Oriol
En este sentido ha propuesto que se permita a las empresas "coger a chavales sin cualificación, que hagan formación dual, con un salario inferior al marcado, hasta que produzcan lo que cobran".
No es la primera vez que el Círculo de Empresarios proponer eliminar el salario mínimo en algunos casos. En septiembre pasado ya pidió que no lo cobraran algunos jóvenes sin experiencia, y ahora extienden su planteamiento a los trabajadores sin formación en general.
También dijo que España es un país "antiempresarios" y denunció que los políticos y gobernantes "están divorciados con sus creadores de riqueza". "Como ganamos más que ellos, no les gustamos", afirmó.
Por último, criticó que el Gobierno "es bastante más liberal" que los anteriores, pero "no lo suficiente", y lamentó que la concesión de licencias para las empresas sigue recayendo "en los funcionarios". "Si damos a funcionarios o burócratas poder arbitrario sobre la concesión de licencias, les estás dando el poder de que den un favor". "Y un país que funciona con el favor tiene el riesgo de convertirse en corrupto", advirtió.
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