La tasa de mora de la banca baja al 13,4% tras su primera caída en un año

El volumen de créditos dudosos en la banca española dio una tregua el pasado mes de febrero y experimentó su primera reducción en un año pese a mantenerse en niveles récord, según los datos publicados hoy lunes por el Banco de España. En euros contantes y sonantes, las entidades de crédito y establecimientos financieros acumulaban 195.093 millones en créditos morosos al acabar el segundo mes del año, lo que suponía una rebaja de más de 2.000 millones de euros respecto a enero.

Así, con relación al total del crédito, la tasa de mora ha menguado del 13,52% al 13,42% con la nueva metodología, que incluye el crédito de entidades de depósito a establecimientos financieros de crédito. Con el criterio anterior, la tasa se situaría en febrero en el 13,65%, con un descenso desde el 13,78% del mes anterior.

En términos absolutos, el volumen de créditos dudosos ya se había reducido ligeramente en enero, después de casi un año engordando, pero en ese primer mes de 2014 la tasa de mora medida con criterios homogéneos seguía subiendo porque el volumen de crédito en vigor estaba bajando.

Y así ha seguido ocurriendo en febrero, el volumen de dinero prestado se contrajo en unos 4.400 millones respecto al mes anterior, al pasar de 1,457 billones a 1,453 billones. La mitad de todo ese crédito corresponden a los préstamos hipotecarios, que concentran la práctica totalidad de esa caída de más de 4.000 millones.

España es uno de los países europeos más afectados por la subida de la morosidad, con un pinchazo inmobiliario especialmente virulenta detrás, pero la mora se ha disparado en el conjunto del Europa hasta alcanzar un total de 800.000 millones de euros, el doble que en 2009, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI). Este lastre y la necesidad de desapalancamiento dificultan aún más que el flujo de crédito se recupere y contribuya a impulsar la economía.

La reactivación española se encuentra en esa dificultad: las empresas deben reducir su nivel de endeudamiento pero al mismo tiempo requieren más dinero para poder invertir y crecer.

De momento, no ha ocurrido. El saldo de préstamos a empresas con las entidades españolas bajó otro 11% en febrero, hasta los 636.138 millones, lo que supone un mínimo desde 2006.

Esto significa que la entrada en mora de los créditos y su vencimiento son superiores a los nuevos préstamos concedidos y por eso baja el saldo global. No obstante, sí hubo en febrero un aumento de la concesión de nuevos préstamos de menos de un millón de euros: se firmaron 10.964 millones, un 5,9% más que en el mismo mes del año pasado. En global, en cambio, el balance es de una caída interanual del 20%.