“No se trata de incentivar los contratos, sino de crear empleo”

Para que un país salga de la crisis y reduzca sus cifras de desempleo debe generar empleo. Y para eso hay que lograr que se creen o se instalen más empresas. Todo lo demás vendrá solo. Esta es la medicina que le receta a España el holandés Ben Noteboom (Nieuwe-Tonge, 1958), consejero delegado de Randstad. Su compañía, dedicada a la gestión de trabajo temporal y búsqueda de directivos, vio cómo el año pasado sus resultados se reducían en varios mercados europeos, por ejemplo, en España y Portugal, donde la facturación bajó el 10,4%. Aun así, han apostado por crecer en el Viejo Continente y acaban de adquirir la división europea de USG People. En su negocio, señala Noteboom, el pez grande es el que manda en la pecera.

Pregunta. El año pasado fue complicado para Randstad en España y Portugal. ¿Cómo cree que terminará 2013?

Respuesta. Este año ambos mercados están funcionando mejor. Soy optimista.

P. ¿Cree que la mejoría tiene que ver con las medidas de sus Gobiernos o porque, simplemente, la crisis ya ha tocado fondo?

R. Nunca estamos completamente satisfechos con las reformas, pero mi visión personal es que España ha hecho muchos cambios. Yo hablo con muchas empresas y viajo continuamente por todo el mundo, y he visto que sigue existiendo una visión pesimista sobre muchos países, pero no sobre España. Porque ha tomado muchas decisiones, algunas dolorosas. Otras reformas todavía no han terminado. Pero creo que ya ha recorrido la parte más complicada del viaje. Nunca se sabe. ¡Yo no vi venir lo de Chipre! Pero soy optimista.

P. Europa es su principal mercado. ¿Les preocupa?

R. En general, hay signos de mejora en algunos países, pero todavía es un mercado a la baja. Sin embargo, no es un negocio que se haya colapsado, solo vive una leve depresión.

P. Randstad ha adquirido negocios de USG People en países europeos. ¿Creen todavía en el potencial del Viejo Continente?

Soy optimista y creo que España ya ha hecho lo más complicado”

R. Nuestra compañía será más grande gracias a esa operación. Y eso siempre es positivo. En nuestro negocio, si tienes una elevada cuota de mercado y el máximo número de negocios en una misma área, creces más. Economía de escala. Se necesita un solo director general, un responsable de marketing, una estructura… Y accedes a mucho más negocio. Si eres eficiente, tu incremento de costes es bajo con respecto al volumen que logras de empresas y candidatos. Ha sido una buena operación, teniendo en cuenta el coste. Y si alguien nos brinda buenas oportunidades por precios razonables, las aprovechamos.

P. ¿Qué planes tienen en los países emergentes?

R. Un negocio como el nuestro no funciona como la industria, que puede producir barato en un país y luego vender caro en otro. En nuestro caso, siempre trabajamos en el mercado local. Y el tamaño de nuestro negocio dependerá del nivel salarial del país donde estemos, porque nuestra facturación está vinculada a eso. En los emergentes, los salarios son considerablemente bajos. Esto no quiere decir que no nos interese: somos grandes en India, por ejemplo. Logramos empleo a 6.000 personas al día; aproximadamente, el 10% de nuestros contratos. Pero el 10% de la gente contratada supone solo el 2% de nuestros ingresos, porque los salarios son considerablemente bajos allí. China tiene una situación similar. Aun así, somos conscientes de que una compañía como la nuestra debe pensar en el largo plazo. Y para ser grandes en el futuro debemos ser grandes en estos mercados tan potentes que en 10 o 15 años serán grandes negocios con mayores niveles salariales.

P. ¿Cree que el mercado laboral español aún es rígido?

R. Sin duda, en el pasado lo ha sido. En España hay mucha contratación temporal, que se generó porque el despido era muy caro. Toda empresa que quiera ser competitiva en un mundo global debe ser capaz de ser flexible. Eso es lo que buscan a la hora de instalarse en un país. En España, gestionar las plantillas ha sido difícil y caro. Y despedir, también. Si quieres atraer negocios, y, por tanto, empleo, debes ser capaz de ofrecer flexibilidad y equilibrarlo con los derechos de los trabajadores. Es complicado. En España continúa habiendo cosas inflexibles.

P. Hace un año entró en vigor la reforma laboral, que precisamente permite el despido más barato, entre otras cosas. No está creando empleo...

R. Si como país mejoras un poco tu flexibilidad, pero tienes una situación tan única como la que atraviesa España... Con el gasto público reduciéndose, las inversiones paradas y con las economías que rodean al país también en baja forma no se crea empleo inmediatamente. Si la solución fuera tan simple y rápida, no estaríamos en crisis.No puedes esperar que con este clima, porque cambies tu legislación, de repente vayas a tener un boom de empleo. Pero estoy seguro de que está ayudando a mejorar la situación estructural.

P. ¿España necesitará más inmigración en unos años?

R. Creo que sí. Es inevitable. En general, en los mercados europeos lo que hará falta será atraer perfiles cada vez más elevados en lo que se refiere a formación.

P. Muchos españoles se están marchando al extranjero. ¿España perderá todo el talento?

R. Durante un largo periodo de tiempo la movilidad laboral fue reducida en el mundo. Luego llegaron periodos en los que las personas empezaron a viajar para trabajar. Ahorraban dinero durante unos años y, después, en general, volvían a su lugar de origen. Han sido trabajadores que han aportado riqueza a su país y han vuelto con más conocimientos. No es necesariamente malo.

P. ¿Y si no vuelven nunca?

R. Entonces habría un problema. Pero no veo una razón por la que en el futuro no vuelvan. Yo veo a nuestra empresa en España y lo que observo es una buena infraestructura, gente brillante y un nivel de costes competitivos en Europa. ¿Por qué no iban a mejorar las cosas en España?

P. La tasa de paro juvenil está desbocada. ¿Qué se puede hacer?

R. Es una situación terrible. Y esta tendencia no solo se observa en España. Es complejo solucionarlo. Porque si incentivas mucho la contratación juvenil vas a tener a parados de mayor edad. La mejor solución es crear empleo nuevo. Atraer empresas. Estimular a los emprendedores para que creen puestos. Y lograr inversiones. A largo plazo, debería tratarse de potenciar la formación que vaya a ofrecer más oportunidades laborales. Alemania, por ejemplo, siempre ha sabido tener enseñanzas técnicas muy adaptadas a su mercado laboral. Son estrategias a largo plazo básicas.