"Irlanda no vetará un retraso del déficit"
La ministra para Asuntos Europeos de Irlanda cree que es preciso tomar medidas a nivel europeo para que los planes de crecimiento sean efectivos
Tras el severo ajuste llevado a cabo en Irlanda —aún en marcha—, el gobierno quiere concentrarse ahora en un plan de crecimiento y creación de empleo. Pero Lucinda Creighton (County Mayo, 1980) defiende que es preciso tomar medidas a nivel europeo para que esos planes sean verdaderamente efectivos. Ha viajado a Lisboa y Madrid para discutir esos temas, entre otros, con sus colegas.
Pregunta: Ante el deterioro económico, ¿cree que sería positivo retrasar los objetivos de déficit más allá de 2013?
Respuesta: Para Irlanda los objetivos son otros, tenemos unos plazos claros y distintos y vamos por delante de las metas fijadas. La idea de relajar las reformas no es algo que estemos considerando para Irlanda. Hemos estabilizado definitivamente las finanzas públicas, ahora hemos dirigido nuestros esfuerzos hacia la agenda de crecimiento y creación de empleo y, aunque las previsiones de crecimiento de la UE en su conjunto sean menores de las esperadas, estamos seguros de que vamos a cumplir los objetivos.
P. ¿Pero impedirían un acuerdo así para otros miembros?
"No creo que Grecia pueda ni deba salir del euro"
R. Somos de la opinión de que no hay una solución única para todos los países. Creemos que debe haber cierta flexibilidad de las instituciones europeas a las circunstancias de sus miembros porque el punto de partida es que necesitamos salir todos de esta crisis. Creo que, si hablamos de España, lo que es bueno para este país es lo que debemos apoyar. Irlanda no va a poner trabas a España, queremos trabajar como socios para avanzar.
P. ¿Ve a Grecia fuera del euro?
R. No creo que Grecia pueda o deba salir del euro. Es verdad que la situación va a tardar un tiempo en resolverse porque es muy difícil, la deuda, los cambios estructurales... Creo que debemos mostrar solidaridad con Grecia porque es importante aprobar el segundo programa de rescate. Al mismo tiempo, se ha generado una cierta desconfianza porque Grecia ha hecho promesas que no ha acabado de aprobar. Tiene que haber un cierto toma y daca.
P. ¿Sigue Irlanda de cerca esas negociaciones para cambiar los términos de su rescate?
"La UE no estaba preparada para afrontar una crisis de esta escala"
R. No, nuestro programa y nuestra senda de recuperación muy distintos de los de Grecia. Somos una economía más pequeña, más flexible y abierta, con un enorme sector exportador y nuestro programa está funcionando. Ni se plantea la necesidad de un segundo rescate para Irlanda. Una de las negociaciones clave para nosotros en los últimos seis meses, cuando se acordó la creación del nuevo mecanismo de rescate, ha sido descartar la participación del sector privado en los rescates de los demás países. Temíamos que suscitando ese fantasma se destruiría la confianza de los inversores y por eso insistimos en julio en que esa participación del sector privado era un caso único y excepcional limitado a Grecia.
P. ¿Cuándo veremos el final de esta crisis?
R. Hasta cierto punto creo que las cosas se han estabilizado. Algunos de los pasos dados en los últimos dos meses han sido especialmente positivos, sobre todo el papel más activo del BCE, una medida muy, muy importante para países como Irlanda o España. Con todo, obviamente la situación en Grecia ha sido muy tensa en las últimas semanas pero pienso que pese a ello la situación en la eurozona se ha estabilizado mucho, si miras cómo estaba Irlanda hace un año o la situación hace unos meses.
P. Hay una crítica unánime a la lentitud en la respuesta de la UE a la crisis. ¿Lo comparte?
R. La realidad es que, por su propia naturaleza, en la UE es muy difícil tomar decisiones. Somos 27 estados distintos, con 27 procedimientos democráticos distintos. Una parte de la soberanía se ha cedido y ahí se pueden tomar decisiones a nivel comunitario pero siempre hay una buena parte que depende de la aprobación de los parlamentos y los gobiernos nacionales. Eso significa, en buena medida, que no estábamos preparados para afrontar una crisis de esta escala. A su debido tiempo, deberemos revisar los procedimientos de toma de decisiones dentro de la UE pero es algo muy complejo, como comprobamos con la convención sobre el futuro de Europa, la ratificación de los tratados constitucionales, el tratado de Lisboa,… No creo que podamos ponernos a hablar de reformar los procesos ahora. No hay tiempo. Ahora, simplemente hay que tratar de alcanzar un consenso sobre el camino a seguir y es lo que está pasando.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.