Intel se anota beneficios récord en 2010

El mayor fabricante del mundo de procesadores, Intel, ha cerrado el ejercicio 2010 sorprendiendo a Wall Street. La compañía tecnológica de Santa Clara (California) se anotó un incremento del beneficio neto del 167%, desafiando a los más pesimistas en Wall Street con el futuro de la compañía. Eso en números traduce en 11.700 millones de dólares (8.764.68 millones de euros), unos 7.300 millones más que en 2009 (5.468 millones de euros).

Buenos resultados, se mire por donde se mire. Las ganancias operativas de la compañía subieron un 179%, tras facturar 43.600 millones de dólares en el ejercicio (32.6615 millones de euros), un 24% más que hace un año. Todo esto tras anotarse un beneficio neto de 3.400 millones en el cuarto trimestre (2.546 millones de euros), sobre unos ingresos de 11.500 millones en los tres últimos meses del año (8.614 millones de euros).

Y todo esto con un margen de beneficio del 66%. Como dijo su consejero delegado, Paul Otellini, "2010 fue el mejor año de la historia" de la firma y espera que "2011 sea incluso mejor". De esta manera, y con estos números, Otellini lanza el guante a los analistas que pusieron en duda a Intel, argumentando que quedó descolgada en el mercado de procesadores para dispositivos móviles.

Récord del lado de los beneficios, y récord del lado de los ingresos. Pero lo que es cierto es que Intel afronta importantes retos estratégicos a largo plazo, porque prácticamente está fuera de juego en el negocio de las tabletas y teléfonos celulares, donde ahora se centra toda la competencia. Eso quiere decir que si quieren entrar en el sector, deberán invertir más o lanzarse a comprar.

Al bucear en sus resultados, se observa también que los ingresos en el trimestre relacionados con los microprocesadores para ordenadores personales fueron planos. La subida está concentrada sobretodo en los centros de datos. Los analistas del sector creen que los nuevos procesadores Sandy Bridge ayudarán a elevar la ventas. Pero por lo general, la valoración fue positiva.

De hecho, sus títulos subían casi un 3% al cierre de mercado. Y hay otro aspecto que siguen los inversores: Intel es de las compañías más seguidas del parqué, porque sus resultados sirven para ver por dónde va la demanda en EE UU y a escala global, tanto del lado de los consumidores como de las empresas. A partir de estos números, se podría decir que la economía mejora.

Esta misma semana, Intel anunció un acuerdo por el que pagará 1.500 millones de dólares (1.123 millones de euros) para zanjar un litigio con Nvidia, que le permitirá acceder a sus patentes. Su rival Advance Microdevices anunció la dimisión de su consejero delegado, Dirk Meyer. Microsoft acaba de romper el matrimonio que vinculaba a Intel al sistema operativo Windows para móviles, a favor de ARM.