Pescadores franceses de anchoa bloquean el puerto de Bayona en protesta por el cierre

Buena parte de los pesqueros franceses que trabajan en la costera de anchoa han bloqueado hoy el puerto de Bayona en protesta por la intención de la Comisión Europea (CE) de cerrar la pesquería en el Golfo de Vizcaya a petición del Gobierno y la flota española, de la que no habían sido informados por las autoridades francesas.

Una cincuentena de arrastreros pelágicos, de los 80 franceses que trabajan en la anchoa, han fondeado a primera hora de la mañana en la ría del Adour, que hace de salida natural del puerto de Bayona, lo que impide cualquier movimiento de entrada o salida de los mercantes. Dos barcos que tenían intención de abandonar Bayona, uno de ellos de chatarra, han tenido que quedarse atracados, según han indicado las autoridades portuarias, mientras que otros navíos permanecen en alta mar a la espera de que quedara libre la entrada. Uno de los primeros resultados de la protesta es que los pescadores han conseguido una cita con los responsables del Ministerio francés de Agricultura y Pesca, que se celebrará mañana en París.

Una reunión que se prevé tensa, según han explicado los profesionales concentrados en Bayona, porque los pescadores quieren escuchar directamente al responsable francés que participó en las conversaciones a tres bandas entre España, Francia y la CE, y que desembocaron el viernes pasado en la decisión de principio de cerrar la pesquería de la anchoa, aunque sin una fecha precisa para su aplicación. El presidente del comité regional de pesca de Aquitania, Philippe Fautous, se ha quejado en particular de que los pescadores no han recibido la menor información de esas reuniones y que no han sido invitados a Bruselas, a diferencia de los españoles.

"Eso es totalmente inadmisible"

Por eso, una de sus exigencias es una reunión en Bruselas con la CE, ya que aseguran que tampoco han tenido acceso a los informes científicos que hablan de agotamiento del pescado y en los que se sustenta la decisión del cierre de la pesquería para posibilitar la regeneración de los bancos de anchoa. "Eso es totalmente inadmisible", es uno comentarios de los profesionales de la pesca concentrados en Bayona que subrayan que "los informes científicos son falsos", y advierten de que si no pueden trabajar en la anchoa, supondrá la muerte de la flota francesa que, a diferencia de la española, no recibe ningún tipo de ayuda comunitaria. Los pescadores franceses admiten que la costera de la anchoa que ellos han iniciado el pasado día 1 es "floja" por la cantidad de pescado capturado pero "muy interesante" por los altos precios (de 10 a 17 euros kilo).

En cualquier caso, niegan la versión de los pescadores españoles de que no hay anchoas, sostienen que en el pasado ha habido costeras peores, que la peculiaridad de este año es que se sacan sobre todo peces grandes y que por ello se niegan al cierre de la pesquería. Dicen que estarían de acuerdo en hacer algo para que la situación de la biomasa no se deteriore todavía más, y así sugieren la demarcación de unas zonas, donde se encuentran las anchoas jóvenes -normalmente cerca de las costas- en las que no se debería pescar. De hecho, aseguran que ya no faenan en esas áreas de reproducción.

Los pescadores franceses están preocupados por el hecho de que si se les obligara a abandonar la costera de la anchoa, perderían la cuota cedida por España con el acuerdo de Arcachon. Dicho acuerdo, firmado entre Francia y España en 1992, prevé que España cede una parte de su cuota de anchoa a Francia a cambio del equivalente en merluza, rape y gallo, con la condición de que los franceses no empiecen a pescar anchoa antes del 1 de junio. Si no se pudiera pescar anchoa a partir de julio, los franceses no podrían utilizar la cuota cedida a España de merluza, rape y gallo que ya han capturado los españoles.