La economía alemana creció un 0,2% en 2002, el ritmo más lento desde 1993

La locomotora económica de la UE pierde gas y amenaza con pararse. El Producto Interior Bruto (PIB) de Alemania creció el 0,2% en 2002 respecto al año anterior, el ritmo más lento desde la recesión que sufrió en 1993. Además, la economía ha ido de más a menos y se estancó en el cuarto trimestre, según los datos difundidos hoy por la Oficina Federal de Estadísticas. Con este crecimiento, Alemania se sitúa por segundo año consecutivo a la cola de los países de la Unión Europea.

Las noticias sobre las cuentas del Gobierno de Berlín no son mucho mejores. El déficit público alemán alcanzó la cifra récord del 3,7% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2002, lo que representa un importe de 77.200 millones de euros aunque la cifra se corresponde con la previsión del Gobierno, establecida en un 3,75%. En 2001 el déficit se elevó al 2,8% del PIB.

El elevado déficit de las cuentas públicas alemanas, que supera ampliamente el límite del 3% del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, se explica precisamente por el débil aumento del PIB en 2002. La primera economía de la zona euro sólo creció un 0,2% el año pasado, después del crecimiento del 0,6 por ciento de 2001, por debajo del objetivo del Gobierno de una progresión del 0,5%.

Mejoran las exportaciones

En cualquier caso, Alemania debe agradecer su escaso crecimiento en 2002 a sus exportaciones, que progresaron un 2,9%. Sin la contribución exterior, el PIB habría registrado un crecimiento negativo del 1,3%, según explicó el presidente de la Oficina Federal de Estadísticas, Hohann Hahlen. Los gastos de consumo de los hogares se redujeron una media del 0,5 por ciento en 2002 respecto al año anterior, tras crecer un 1,5% en 2001, mientras que los gastos de consumo de las administraciones públicas aumentaron un 1,5%.

Asimismo, la formación bruta de capital fijo -que incluye la inversión de las empresas, de los hogares y de las administraciones-, decreció un 6,4%, una caída que se añade al descenso del 5,3% del año pasado. En el cuarto trimestre, la economía germana registró un crecimiento prácticamente nulo en comparación con el trimestre anterior, tras crecer un 0,3% en el tercer trimestre, según los datos provisionales de la Oficina Federal.

Uno de los economistas de la Oficina, Norbert Hartmann, ha dicho incluso que no puede descartarse que la actividad económica se contrajera durante este período. "Es difícil decir si habrá un ligero crecimiento o decrecimiento en los datos finales", agregó. Las cifras definitivas se conocerán en febrero.