Dos avisos a Trias en una semana

Dos avisos en una semana. La oposición, que tiene mayoría en el Consistorio de Barcelona, ha puesto en evidencia una vez más al alcalde Xavier Trias (CiU), que necesita apoyos como agua de mayo porque con sus 14 ediles no puede aprobar ninguna de sus iniciativas. Ayer el Partido Popular (PP), sumándose al PSC y a ICV-EUiA, dijo no al proyecto de transformación de la plaza de las Glòries que el Consistorio presentó la semana pasada. Los socialistas, populares y ecosocialistas no están de acuerdo ni en el fondo de la propuesta ni en la forma, porque el tercer teniente de alcalde y encargado de Hábitat Urbano, Antoni Vives, lo exhibió ante los medios y vecinos sin buscar el acuerdo político. Ese fue el mismo motivo por el que también Vives se vio obligado a retirar de la Comisión de Urbanismo el plan con el que pretendía desencallar la transformación de Can Batllò, la antigua colonia del barrio de Sants.

Alberto Fernández Díaz, el presidente del PP, fue el más contundente en las críticas a CiU en esas dos iniciativas urbanísticas. Su tono subió mucho más tras ver frustradas sus expectativas de entrar en el gobierno. Solo Unitat per Barcelona (UxB) apoyó a Trias. El alcalde respondió ayer a los concejales "que reflexionen y no actúen solo con criterios de oposición".El PSC presentará el viernes en el pleno una proposición que insta a Trias a retirar la propuesta de transformación de la plaza de las Glòries. Lo que ahora defiende el gobierno de CiU modifica lo aprobado por el pleno municipal en 2007, también con los votos nacionalistas. Este acuerdo, conocido como Compromís per a Glòries, también fue refrendado en su día por las asociaciones de vecinos de la zona (El Clot-Camp de l'Arpa, Sagrada Família, Poblenou y Fort Pienc) y ahora piden que no se eche en saco roto.

Vives propone una gran plaza parque y reducir la longitud del túnel de la Gran Via utilizando una galería ferroviaria que conecta con la estación de Francia. Con ello el Ayuntamiento evitaría el peraltamiento de la plaza y abarataría el coste a más de la mitad.

Sin embargo, la clausura del túnel ferroviario depende de que el Ministerio de Fomento decida prescindir de la vía. Se trata de unos cambios de calado en la red de trenes de la ciudad que en última instancia pivotan sobre la entrada en funcionamiento de la estación de la Sagrera, calculada para 2016 pero sin fecha clara en el calendario.

En todo caso, como solución provisional, la propuesta de Trias para Glòries admite que el tráfico de los coches de entrada y salida de la Gran Via -alrededor de unos 100.000 diarios- pasaran por superficie partiendo en dos la plaza proyectada.

Tanto socialistas como el PP e ICV coinciden en que es un planteamiento "muy poco riguroso" porque da por hechas cosas que no lo están. "Lo que han hecho es un anuncio publicitario para que parezca que hacen cosas cuando no es así, solo las venden", criticó ayer Fernández Díaz al explicar que apoyan la propuesta del PSC. Para Ricard Gomà (ICV), lo que plantea CiU es irreal mientras no se hagan estudios de movilidad. ICV esta en contra de anular túneles ferroviarios.

Anoche también se reunieron las asociaciones de vecinos afectadas por el plan, para decidir una posición común con vistas a la reunión que celebrarán con el Consistorio el 14 de febrero. "La propuesta que han hecho no es creíble. El alcalde tiene que concretar muchas cosas", explicó Jordi Casanovas, representante de Fort Pienc. Los vecinos no ven factible el calendario propuesto por el Ayuntamiento y además critican que el futuro de la plaza dependa de una decisión de Fomento. La movilidad, la superficie de zonas verdes y el cumplimiento y la redistribución de la zona urbanizable son otros asunto que preocupan a las asociaciones.