Los funcionarios protestan durante la visita de Mas a Lleida

Un fuerte cordón policial impidió ayer a un centenar de funcionarios concentrados en la Llotja de Lleida acercarse al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que fue recibido con gritos por los manifestantes, entre los que había representantes del 15-M. Los funcionarios quisieron demostrar así su rechazo a los recortes de la Generalitat en el sector público, aprovechando la visita de Mas y de los consejeros de Agricultura, Josep Maria Pelegrí, y Cultura, Ferran Mascarell.

El presidente, que asistió al estreno del musical de gran formato Generacions, con el que el Orfeó Lleidatà celebra sus 150 años, no hizo declaraciones.

Antes de la llegada de Mas, los Mossos d'Esquadra cruzaron palabras subidas de tono con algunos funcionarios que habían ocupado el espacio de los dos cordones que separaban el aparcamiento central del palacio de congresos. Los agentes les reprocharon que se acercaran al espacio central, insinuando que los recortes también les afectan a ellos.