Muere un 'mosso' al caer al vacío mientras perseguía a un ladrón

Un mosso d'esquadra, Ernest Magriñà, de 50 años, murió ayer en Montblanc (Conca de Barberà) al precipitarse al vacío desde el tejado de la fábrica al que había subido durante la persecución de un presunto ladrón. Un compañero que le acompañaba también cayó y resultó herido.

Los hechos sucedieron a las 11.30, cuando los dos agentes trataban de alcanzar a un hombre que había huido de un control policial en Les Borges Blanques (Les Garrigues) conduciendo en dirección a Tarragona. La policía dio el aviso de alarma y dos patrullas de Mossos de la región policial del Camp de Tarragona se movilizaron para detenerlo. El presunto delincuente se sintió acorralado y decidió abandonar el vehículo en un puente situado a pocos metros de la carretera N-240.

Los agentes le localizaron solo unos instantes después, huyendo a pie por un camino rural al que se accede desde un aparcamiento de camiones. El sendero discurre por la parte posterior de la fábrica Fapre Behr, que produce componentes de automóvil.En su huida, el delincuente saltó una valla y accedió a las instalaciones, intentando en vano despistar a los Mossos, que procedieron a rodear la nave para sorpresa de los trabajadores, que se hallaban haciendo inventario. "Estábamos contando piezas cuando de repente empezamos a ver mossos por todas partes", explicó Enrique del Águila, empleado de Fapre Behr, que tras cinco horas después del suceso aún no salía de su asombro.

El presunto ladrón intentó entonces una última treta: subir al tejado de uralita de una nave. Dos agentes le siguieron y fue entonces cuando una plancha del tejado cedió bajo los pies de los dos mossos. Ernest Magriñà falleció en el acto y su compañero, de 28 años, se fracturó una pierna. Magriñà pertenecía a la quinta promoción de la policía autonómica. Se dedicaba al área de seguridad ciudadana y desde 2009 trabajaba en la comisaría de Montblanc, informa Rebeca Carranco. Antes prestó servicio en Tarragona y en Valls, según refleja el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC).

Los trabajadores de la fábrica recuerdan que Magriñà corría a toda velocidad por la nave solo unos instantes antes del trágico accidente. "Me lo encontré con una pistola y me dijo que había un individuo en la fábrica; lo avisaron por la radio de que el ladrón había subido al tejado y me preguntó cómo podía subir a él", explica Del Águila. Otro de los trabajadores, Isidro Anglès, fue quien trató de reanimar a Magriñà, sin éxito, tras el accidente. "Estaba en el suelo en un pasillo del área de montaje. Soy voluntario del parque de Bomberos del Sarral. Le hice la respiración asistida y le tomé el pulso, pero no pude salvarle", lamentó Anglès.

Los compañeros de Magriñà consiguieron detener al presunto ladrón instantes después de la muerte. El juez levantó el cadáver cuando habían transcurrido casi cuatro horas. El consejero de Interior, Felip Puig, decretó ayer día de luto oficial en todas las comisarías de Cataluña. Además, el Ayuntamiento de Montblanc anunció tres días de luto por la muerte del agente.