La 'ganga' del nuevo 'velázquez'
Dos coleccionistas estadounidenses compran por 3,5 millones de euros 'Retrato de un caballero', atribuido al maestro sevillano por el experto Peter Cherry
Si bien inalcanzable para el común de los mortales, la cifra de 3,5 millones de euros obtenida ayer en subasta por Retrato de un caballero, obra de Diego Velázquez no supone en sí misma ningún récord si se trata de reseñar el cierre de la temporada otoñal de subastas de Londres. Lo que ha merecido la atención del mundillo del arte ha sido el reciente descubrimiento de la autoría de un retrato de Diego Rodríguez de Silva, que propulsó su cotización desde los 350 euros inicialmente estimados por la casa Bonhams hasta que uno de sus expertos detectó en la obra los trazos del maestro sevillano.
La pintura de ese caballero que en el siglo XVII posaba con una túnica blanca y negra formaba parte de la colección atribuida a un pintor de dos siglos más tarde, Matthew Shepperson, y como tal estuvo a punto de ser puesta a la venta en Oxford en verano del año pasado. La intervención de Peter Cherry -profesor del departamento de Historia del Arte del Trinity College de Dublín y una de las principales autoridades mundiales sobre Velázquez y su escuela- truncó la transacción. Cherry determinó que la pintura había sido en realidad ejecutada por el artista español entre 1631 y 1634, durante su estancia en Italia. Y que se trataba de una de las escasas obras de Velázquez, entre el apenas centenar que ha llegado a nuestros días, que todavía permanecía en manos privadas.
El retrato de Diego Rodríguez de Silva es una "pieza única", según la sala
El pintor Pieter Brueghel el Joven registró la víspera un nuevo récord
Así seguirá, porque los coleccionistas estadounidenses Otto Naumann y Alfred Bader consiguieron ayer la mejor puja -derrotando a otro incisivo comprador que participó en la subasta vía telefónica- en la sesión de ayer en la sede de Bonhams, frente a las presumibles ambiciones de algunas de las pinacotecas más destacadas de Europa, como el Museo del Prado. Nuamann admitió, en una entrevista con Bloomberg, que estaba dispuesto a pagar el doble por el cuadro de Velázquez, puesto que son contadas las ocasiones en que este y otros trabajos de los mejores artistas españoles del siglo XVII emergen en las subastas de arte. "Es la ganga de la década. Estábamos dispuestos a pagar muchísimo más del doble. Es muy, muy barato", afirmó Nauman a la salida de la subasta.
La venta del retrato de Diego Rodríguez de Silva, una "pieza única" según la descripción del experto de la sala británica, Andrew McKckenzie, ha conseguido eclipsar gracias a su atípica singladura otras operaciones de mayor montante económico que desde el martes se celebran en las principales casas de subastas de Londres. El pintor Pieter Brueghel el Joven, por ejemplo, registró la víspera un récord de cotización de su obra al obtener tras la sentencia del martillo de Christie's más de ocho millones de euros por el cuadro La Batalla del Carnaval contra la Cuaresma. El cuadro del autor flamenco (datado en 1559) fue adquirido hace cinco años por el actual vendedor en la misma sala por la mitad de ese importe.
Los tiempos de recesión económica se vieron, sin embargo, reflejados en la ausencia de compradores para una pintura de Francisco de Goya, El Retrato de Juan López de Robredo, que figuraba como una de las estrellas de la subasta de Christie's, con una horquilla estimada entre los 7, 2 millones de euros hasta más de nueve millones. Esta pieza sin comprador nos muestra a uno de los bordadores que trabajó a las órdenes de Carlos IV, cuya importancia en la corte queda reflejada en el hecho de que tuviera los medios para encargar su propio retrato.
La temporada ha servido también pra confirmar -entre bambalinas, eso sí- la presencia de una nueva generación de compradores procedentes de países emergentes que prefieren adquirir obras en las subastas de salas establecidas en lugar de decantarse por las propuestas de las galerías.
Babelia
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