'La caída de los dioses' cierra en el Teatro Arriaga su gira por España

La vida teatral de La caída de los dioses, un homenaje del director esloveno Tomaz Pandur a la película homónima de Luchino Visconti, finaliza este fin de semana en el Teatro Arriaga. La versión de Pandur, fiel al guión de la película de 1969 sobre una rica familia alemana de industriales que acaba poniéndose al servicio del régimen nazi para conservar su influencia, cierra en Bilbao una gira que comenzó con su estreno en Valladolid el pasado mes de marzo con la actriz Belén Rueda a la cabeza del reparto.

Belén Rueda interpreta a la baronesa Sophie von Essenbeck sobre un escenario en el que los movimientos de los actores se reflejan en un espejo enorme, mientras suena en directo la música de un piano. El actor Pablo Rivero -el hijo mayor de los Alcántara en la serie televisiva Cuéntame- encarna en su primer papel en el teatro al hijo de la baronesa, el personaje que Helmut Berger dio vida en el cine, y a Alberto Jiménez le corresponde el personaje que interpretó Dirk Bogarde. "Es muy visual", advierte Rueda. "No hay que entenderlo todo. Hay que sentirlo".

Pandur exprime todas las pistas teatrales que encontró en la película de Visconti, para contar a través de el declive de una familia poderosa en la Alemania de 1933, la capacidad de destrucción del odio y la lucha por el poder. El ayudante de dirección, Damià Plensa, recuerda que Pandur decidió montar La caída de los dioses porque los conflictos que aborda siguen plenamente vigentes ocho décadas más tarde.

Los actores coinciden en que en la historia de la descomposición de la familia protagonista por el afán de mantener el poder, subyace algo de Edipo, Macbeth y Ricardo III, y el director ha ampliado las influencias a El rey Lear y Hamlet.