De profesión, bloguera
En el preciso instante en que las marcas de moda comenzaron a invitar a blogueros a sus desfiles, las periodistas del sector pusieron el grito en el cielo. ¿Quiénes eran esas personas y por qué demonios sus asientos estaban en la codiciada primera fila, justo al lado de Anna Dello Russo, Carine Roitfeld y Anna Wintour?
En un principio, los responsables de las revistas las miraron de reojo. No sabían si fiarse de alguien que escribía sobre lo mismo que ellos y lo publicaba en Internet de forma gratuita. Una vez superadas las reticencias iniciales y tras haber comprobado que nadie quería robarle el puesto a nadie, las blogueras comenzaron a aparecer en las revistas, sobre todo las que posaban en sus blogs con sus propios estilismos.
"Siempre estoy pensando en qué diseñadores entrevistar. Todo en mi vida es susceptible de ser publicado"
En medio de ese maremágnum editorial navega Susie Lau (Londres, 1983). En Internet, Susie Bubble. Se caracteriza por sus rasgos orientales, su pelo largo y con flequillo y su vestuario, ecléctico y arriesgado. "Cuando digo que estoy en una burbuja es porque miro las cosas con mi propia óptica, con una perspectiva muy personal", cuenta en conversación telefónica. Susie es burbuja desde que en 2006 abriese su blog (www.stylebubble.co.uk) y empezase a escribir sobre moda. Su enfoque, efectivamente, es particular: "Tiene que ver con el descubrimiento. En Londres hay un montón de talentos y diseñadores jóvenes para dar a conocer, y por eso abrí el blog", explica.
Sus habilidades en este difícil terreno de elegir nuevos artistas le valieron en 2008 el puesto de editora de Dazed Digital (la versión en línea de la revista Dazed & Confused). Parecía que le venía como anillo al dedo: viajaba por el mundo de desfile en desfile y su trabajo consistía precisamente en seguir encontrando ingenio fresco. "Durante mi estancia allí cuadrupliqué las visitas en la web", comenta. Y lo dice en pasado porque dos años más tarde abandonó la cabecera para centrarse en su proyecto personal: "Editar en Dazed y luego en mi propia web era demasiado trabajo", apunta.
La decisión, a priori, un salto al vacío, no ha podido resultar más acertada. Las 35.000 personas que entran diariamente en su web la convierten en una referencia. Es una cifra muy golosa para marcas que quieren un escaparate desde el que conectarse de una forma más próxima con una audiencia joven. El listado de los que han llamado a su timbre -o, en este caso, escrito a su correo electrónico- es largo y variado: Dolce & Gabbana, Smythson, Acne, Dr. Martins o TopShop. Las labores que requieren de Susie, licenciada en Historia por la UCL, son también diversas, pero apelan a la imagen de marca que ha creado de sí misma: "Me suelen pedir que haga estilismo de sus productos, que escriba algún tema o que sea la editora estrella de su blog. Depende de cada proyecto".
Esta temporada se estrena como imagen del catálogo de la marca de calzado Pretty Ballerinas. Al preguntar a David Bell, fundador y director de la firma, por qué ella, lo tiene claro: "Nos encanta su estilo personal y cada día tiene más influencia en el mundo de las tendencias y la moda. De hecho, creemos que ya es todo un icono, una de las blogueras más importantes del mundo".
Lo cierto es que ella misma confiesa tratar a su blog como si fuera su bebé: "Escribo a diario. Es como un trabajo regular, aunque va mucho más allá de un horario de oficina. Siempre estoy pensando en él, en qué diseñadores entrevistar o qué tiendas visitar. Todo en mi vida es susceptible de ser publicado". Es verdad. En la sección de preguntas frecuentes responde a sus lectores dudas tan peregrinas como si le gusta el sushi ("sí, pero solo si es fresco") o si quiere tener hijos algún día ("no especialmente"). La completa dedicación a su "criatura", por cierto, también ha provocado cambios en su estilo de vida. Para empezar, no sale de casa sin su portátil, porque cualquier momento es bueno para escribir. "En el aeropuerto, en el bus..., incluso aunque no tenga conexión a Internet. Lo escribo, y cuando encuentro wifi, lo publico".
Se resiste, sin embargo, a aventurar sobre las claves del éxito bloguero. Del suyo o de cualquier blog. Pero sí que apunta a que "los que más visitas tienen son los que hacen cosas diferentes. Lo ideal es no copiar a otros, encontrar una voz propia a la hora de presentar los contenidos".
Quizá sea esa la razón de que sus fotos con estilismos (en los que abundan los colores y las prendas estructuradas) y sus textos sobre nuevos hallazgos (principalmente, tiendas y diseñadores) le hayan garantizado un puesto entre los blogueros más influyentes del mundo a ojos del periódico The Guardian. Las marcas ya la tratan como tal.
Por cierto, aunque ha estado con un montón de estrellas del rock, nunca se ha sentado al lado de Anna Wintour en un desfile. "Pero ella no me intimida, ni me muero por conocerla. Es solo una persona más".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.