El fiscal acusa a Millet de estafar al fisco con el IVA

Fèlix Millet y su entorno acumulan problemas judiciales por su gestión al frente del Palau de la Música. La fiscalía de Barcelona ha presentado en los juzgados una querella contra el saqueador confeso de la institución musical por un presunto delito de fraude fiscal.

La investigación afecta también a la mano derecha de Millet, Jordi Montull, y a la hija de este, Gemma Montull. Los tres defraudaron, presuntamente, casi 700.000 euros a cuenta de las deducciones del IVA. Los exresponsables del Palau pidieron a Hacienda la devolución de unas cantidades de dinero por deducciones superiores a las que correspondían a la institución. El fiscal les acusa de un delito contra la hacienda pública y de otro de falsificación de documentos mercantiles.

La supuesta estafa se cometió después de que, en 2005, el Tribunal Superior de Justicia de las Comunidades Europeas declarase nula una ley española por la cual las empresas y entidades que reciben subvenciones -como el Orfeó- no podían deducirse el 100% del IVA. La sentencia comunitaria obligó a resarcir a los perjudicados por esa norma injusta: la Agencia Tributaria debía devolver las sumas de dinero que los afectados no se habían podido deducir. En el caso del Orfeó, las cuentas quedaron saldadas en 2006. El problema es que, tras esa fecha, Millet y Montull siguieron solicitando devoluciones a pesar de que ya no les correspondía recibirlas.

La querella, elaborada por el fiscal de delitos económicos Francisco Bañeres, relata las "operaciones fraudulentas de cierta complejidad" que fueron detectadas por una inspección de la Agencia Tributaria. Hacienda reconoció el derecho de la institución a ser compensada con 2,1 millones. Como la cantidad devuelta era de 1,3 millones, el saldo que quedaba por compensar era de 755.000 euros. Sin embargo, en sus declaraciones de 2006 y 2007 los querellados se compensaron cuotas por periodos anteriores hasta alcanzar la suma de 1,3 millones de euros, una cantidad "ostensiblemente superior" a la permitida. Según el fiscal, las cuotas compensadas que son improcedentes -porque ya habían sido cobradas- ascienden a 549.749 euros.

No es la única presunta estafa que recoge la investigación. Hay otra modalidad de fraude al fisco, también vinculada a las deducciones del IVA, por la que los querellados se habrían apropiado de 128.155 euros. Ese segundo delito tiene que ver con la ejecución de obras y la entrega de suministros en la vivienda particular de Millet, en L'Ametlla del Vallès.

El exresponsable del Palau encargó las obras e "instó a los industriales" para que "indicasen falsamente", en las facturas que emitieron, que todos los trabajos se habían realizado en las dependencias y por cuenta del Palau. Esas irregularidades aparecieron en la documentación incautada durante el registro en las dependencias del Palau, el pasado 23 de julio de 2009. Un total de 10 empresas "se avinieron" a entregar las facturas, que, en realidad, "respondían a bienes y servicios de naturaleza particular".

El fiscal concluye que el IVA repercutido en esas facturas fue deducido por parte del Palau "como si, efectivamente, se tratase de servicios adquiridos por él". En ese punto entran en escena los Montull. Padre e hija "no dudaron en remitir" a una gestoría que elaboraba las declaraciones las facturas para que se dedujera el IVA. El presunto delito se cometió en 2007.

El fiscal dirige su querella, además, contra Edmundo Quintana, asesor fiscal y "persona de contacto" en la declaración del IVA de 2007, cuando se recibieron las compensaciones indebidas.

La querella supone la tercera causa judicial que se abre contra Millet y su entorno. Al margen de la causa principal -el expolio de 35 millones del Palau- Millet y Montull están implicados por las presuntas irregularidades en la tramitación urbanística de un hotel de lujo que iba a construirse junto al Palau.