El autobús rápido llegará tarde
Los cuatro primeros corredores del Retbus no estarán listos hasta 2012 - Seis meses después de la presentación solo se han hecho obras menores
En marzo, el Ayuntamiento de Barcelona anunció la llegada del Retbus, la panacea para la movilidad pública en Barcelona. Seis meses después, la nueva red de autobuses rápidos aún no echa a andar. Poco antes de las elecciones municipales, el Consistorio y la plana mayor de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) presentaron el sistema, compuesto por 12 líneas, organizadas como una malla y que reduce el tiempo de viaje en 10 minutos. La entonces presidenta de TMB y teniente de alcalde, Assumpta Escarp (PSC), aseguró que antes de finalizar el año estarían listos cuatro corredores. Sin embargo, hoy por hoy solo se han realizado obras menores. El autobús rápido llegará tarde.
El gobierno de Xavier Trias (CiU) acepta que la puesta en marcha de la primera fase, calculada en cuatro millones de euros, podrá dilatarse hasta principios del 2012. Fuentes de TMB aseguran que el retraso se debe a diferentes posiciones en el seno del gobierno municipal sobre el sistema. Afirman que, mientras que Joaquim Forn (CiU), primer teniente de alcalde, es partidario de la implantación del Retbus, el regidor de movilidad, Eduard Freixedes (CiU), cree que hay que hacerle cambios sustanciales.
Las reuniones técnicas entre el Consistorio y TMB se retoman este mes
La supuesta división la niega un portavoz del Ayuntamiento, que aclara que "el Consistorio apuesta por la implantación del Retbus. No se ha parado nada. Se trabaja sin prisa pero sin pausa". En 2009, CiU apoyó en el pleno el proyecto de la red ortogonal de autobuses, que propuso Esquerra Republicana. La idea también aparece en su programa electoral, aunque no es la misma que anunciaron los socialistas.
Un portavoz de TMB explicó que entre marzo y julio se celebraron varias reuniones técnicas entre la empresa y el Ayuntamiento y que en el calendario inicial de puesta en funcionamiento "se dibujó un escenario de otoño". Desde el Ayuntamiento recuerdan que CiU llegó al poder hace dos meses, con el verano de por medio, y que las reuniones sobre el Retbus se retomarán este mes.
Desde el grupo socialista aseguran que antes de marcharse del gobierno dejaron todo listo para poner en marcha el sistema. Hasta el momento, según el Ayuntamiento, se han adjudicado y realizado algunas obras menores como la adaptación de algunos andenes de la plaza de Lesseps, en Prat de la Riba y de la terminal de autobuses de Zona Universitaria. Siguen pendientes las obras de calado, como la coordinación semafórica que permitirá una mayor agilidad en el servicio, la adaptación de carriles especiales y de zonas de adelantamiento y modificar algunos autobuses articulados de 18 metros que prestarán servicio en el Retbus. También se espera la llegada de nuevos vehículos, de 24 metros de longitud, que tendrán que ser homologados por el Área Metropolitana para entrar en servicio.
Las fuentes de la empresa creen que, si aprieta el acelerador a fondo, el Ayuntamiento logrará poner dos líneas en funcionamiento antes de que acabe el año, la H5 -Zona Universitaria hasta Fabra i Puig- y la V1 -plaza de Espanya a Sarrià-. Cuando se complete, el Retbus contará con los 12 corredores, que sumarán 227 kilómetros y estarán divididos en siete ejes verticales y cinco horizontales. Esta red será complementaria con los autobuses tradicionales y los de barrio. El Retbus permitirá transportar un 30% más de viajeros que el sistema actual.
Aunque la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) aún no tiene aprobado el presupuesto de este año, del que saldrá una parte de los fondos para el Retbus, una portavoz del departamento de Territorio y Sostenibilidad calcula que será similar al del año anterior, 291 millones de euros. Sin embargo, Barcelona y TMB podrían asumir el coste de la primera fase. El nuevo sistema implicará la desaparición y reorganización de algunas de las actuales líneas de autobús tradicional, por lo cual TMB podría reorganizar sus recursos.
Los expertos alertan sobre la necesidad de que la implantación del Retbus se haga sin pausas. De lo contrario, advierte el catedrático de Berkeley, Carlos Daganzo, uno de los padres del modelo, no se observan los beneficios del sistema en la movilidad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.