_
_
_
_
_

Caminar hacia el vacío

La televisión municipal sevillana multiplicó la deuda pese a carecer de fondos

Javier Martín-Arroyo

Una huida hacia adelante. Sin mirar atrás, con fe ciega en el poder de la deuda pública, esa vaca que ciertos gestores engordan con pienso ajeno hasta el límite. Los anteriores responsables de la televisión pública sevillana, Giralda Televisión, protagonizaron esa huida sin ningún pudor gracias al pienso de las productoras audiovisuales pese al grave lastre financiero.

Un dato ilustra esta carrera hacia el vacío: entre enero y mayo de 2011 (mes de elecciones municipales) se gastaron cinco millones y hoy día la caja de la cadena dispone de 7.600 euros, insuficiente para las nóminas de los trabajadores en agosto.

Todas las miradas están puestas en el exdirector Antonio Silva, que aprobaba los gastos y tomaba decisiones bajo la supervisión de la concejal Maribel Montaño (PSOE). Como prueba de su gestión, el PP ha desvelado facturas como la de un taxi a Mérida que Silva tomó por 300 euros para acudir a un consejo de la Caja de Extremadura, y que intentó facturar a la televisión sevillana a pesar de que ya contaba con una dieta de 550 euros.

"Me dijeron que el dinero llegaría y que tirara para adelante", alega el exdirector
Más información
Giralda TV solicita un preconcurso de acreedores por los 11 millones de deuda
Una "tele" local llena de estrellas
La burbuja audiovisual pincha

En el Consejo de Administración de Giralda TV de esta semana, el gerente Pablo Castilla, único directivo que el PP ha salvado de la etapa anterior por sus informes en los que alertaba del peligroso rumbo de la cadena, decía: "Las previsiones de ingresos eran demasiado optimistas e irreales. Podría haber dimitido o no rendirme y poner de manifiesto esta situación y que se adoptaran soluciones", refleja el acta del Consejo. Ya en mayo de 2010 Castilla expuso en un exhaustivo análisis: "Si no se toman medidas inmediatas, la empresa entrará en causa de disolución". El informe posee el sello de registro de entrada en la televisión, pero su director, Antonio Silva, asegura que nunca leyó las dos comunicaciones de Castilla que auguraban la quiebra.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

"Nunca recibí oficialmente esos informes, sino que se incluyeron por registro de entrada", matiza. Fuentes municipales aseguran que Silva conoció ambos informes del gerente y que incluso existen pruebas de ello, pero no han sido aportadas a este diario. El exdirector alega que ya en 2010 propuso medidas de ahorro por valor de 680.000 euros mediante la eliminación de programas, y que logró un ahorro de 80.000 euros al mes gracias al traslado de la televisión a sus propios estudios.

"Era una huida hacia adelante. Reducíamos y se aprobaba, pero no reducíamos suficiente porque confiaba en que íbamos a remontar las pérdidas. Giralda nació viciada y sin un presupuesto real, y el Ayuntamiento nunca puso el dinero. Montaño y los consejeros me trasladaron desde el principio que el dinero llegaría y me dijeron que tirara para adelante", aduce Silva.

Un directivo de la cadena que pide el anonimato critica que el exdirector incurriera en dispendios: "No había austeridad en nada. Todos los gastos eran ilógicos y excesivos. Y sobre todo, si tienes un presupuesto, no puedes gastarte el doble. Conocían la situación de la empresa y seguían aumentando la bola. En la vida hay que saber decir no".

Esa bola de nieve de Giralda TV creció hasta casi 11 millones de débito. La semana pasada presentó un preconcurso de acreedores para lograr un plazo y renegociar la deuda. Entre las productoras, a las que muchas voces acusan de inflar presupuestos ante las cadenas públicas, solo Mediasur cortó de súbito en mayo la producción de contenidos por la deuda que arrastra de tres millones.

El exalcalde Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE) apostó en 2009 por una televisión municipal al estilo de las que gestionaba el PP en el resto de capitales andaluzas, pero con ambición ideó una cadena de calidad que costara 5,2 millones al año. A pesar de ello, en 2009 el Ayuntamiento aportó 150.000 euros, en 2010 dos millones y en 2011 cuatro millones.

Tanto Monteseirín como Montaño rechazaron ofrecer su versión para este reportaje.

Esta semana el PP ha usado la metáfora de levantar las alfombras para encargar un informe sobre las responsabilidades de los anteriores gestores. Y ha amenazado con acudir a los tribunales por lo que ha denominado un "auténtico expolio". José Antonio Salido, concejal de IU, censura: "El PP no la cerrará porque es un caramelo demasiado jugoso. Sevilla es una pieza estratégica y la tele un instrumento útil desde la propaganda y la demagogia". El alcalde, Juan Ignacio Zoido, ya ha anunciado que reducirá el presupuesto de manera drástica, pero que el proyecto sobrevivirá.

La triste historia es que las 15 principales televisiones municipales andaluzas tienen un recorrido similar a la sevillana. La caída de los ingresos publicitarios y la limitada salida comercial de sus producciones propias provocan que sus directivos jueguen a los malabares financieros sin remedio. Eso sí, entre las cadenas municipales andaluzas Onda Jaén se lleva la palma: cuesta cada año 3,5 millones y todo es déficit porque apenas cuenta con ingresos. Desde su creación en 2001, acumula un déficit superior a los 20 millones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_