"La tragedia es la corrupción que ha habido y la que hay"

Las elecciones generales de Nicaragua, previstas para el 6 de noviembre, plantean una rara suerte de déjà vu para los habitantes del país centroamericano. Mientras el presidente y candidato del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), Daniel Ortega, echa mano de canciones propagandísticas que a finales de los ochenta lo vendían al electorado como un "gallo ennavajado", el empresario Fabio Gadea, según las encuestas el candidato opositor con mayores posibilidades de plantar batalla, asegura sentirse orgulloso de haber sido miembro de la contra, la guerrilla financiada por EE UU que combatió al primer Gobierno de Ortega.

Gadea (Ocotal, Nicaragua, 1931) organizaba desde Costa Rica el aparato de comunicación de la guerrilla derechista, y sufrió un atentado que casi le cuesta la vida. "Me favorece haber sido un contra. Luché con decencia, con honestidad", dice Gadea, candidato de la Alianza Partido Liberal Independiente, una coalición política que reúne a organizaciones liberales y disidentes del FSLN.

"Me favorece haber sido un 'contra'. Luché con decencia, con honestidad"

¿Cómo ve ahora Gadea a Ortega? "Miro a Daniel Ortega totalmente desmejorado", dice. "Apoyé de cierta forma el proceso revolucionario en 1979. Viví en Nicaragua hasta 1982, cuando ya no aguanté la persecución. Me fui a Costa Rica. El Ortega de aquella época era un personaje con mística revolucionaria, aunque poco a poco se fueron viendo fusilamientos silenciosos, confiscaciones de toda clase, familias que tuvieron que irse del país. Sin embargo, se le daba a esa gente [del FSLN] el beneficio de la duda. El Daniel de ahora es supermillonario, gobierna con su familia, son dueños de tres canales de televisión que compraron con el dinero que [Hugo] Chávez da para Nicaragua, y que él no hace pasar por el Congreso. Son gente voraz, mucho más ricos que Somoza. Un Ortega así lo veo pésimo para el país", afirma el opositor.

Gadea asegura que obtendrá votos suficientes para vencer, aunque las encuestas marcan una distancia considerable. Una encuesta de Cid Gallup publicada en mayo daba una intención de voto del 38% al candidato sandinista, mientras Gadea obtenía un 28%.

Gadea piensa que su partido tiene tiempo para remontar. "Las encuestas son hechas entre gente que al contestar tiene miedo porque les pueden quitar lo que les dan. No dicen la verdad. Voy a tener más del 50% de votos. Estoy seguro de que voy a ganar, pero no de que no van a robar la elección, porque están preparando precisamente el mismo fraude que hicieron en 2008", dice.

El político hace referencia al fraude denunciado por la oposición en las elecciones municipales de 2008, que sumieron a Nicaragua en una profunda crisis política de la que aún no se recupera. Gadea denuncia "estrategias" del oficialismo para perjudicar a los candidatos de oposición. "Nos están bloqueando fiscales electorales, solo ellos [FSLN] quieren fiscalizar para agarrar la boleta electoral y en lugar de 71 votos, agregarle un palito y ponerle 171 votos, como hicieron en las elecciones de 2008", asegura.

Gadea es un político conservador, popular en ciertas zonas rurales, que enaltece la honestidad y que afirma que su edad no es obstáculo, como dicen sus rivales. "La gran tragedia de este país", afirma, "es la gran corrupción que ha habido y la que hay, el afán desmedido de todo el que llega al poder de hacerse millonario. Soy un hombre mayor, y lo único que me queda es dejar una semilla sembrada para que nuestros hijos no sufran lo que nosotros sufrimos... A la juventud le gusta un hombre maduro; es mentira que les guste un chavalo [muchacho]. Un hombre para gobernar necesita ser maduro, honrado. Decir la verdad, tener compasión por el pueblo".