¿Debate energético en Euskadi?

Aralar lleva mucho tiempo intentando socializar el debate sobre el modelo energético vigente y futuro de la CAV. Socializar el debate significa controlar al Gobierno en su acción sobre esta materia, presentar propuestas propias, participar en las reivindicamos sociales... Fomentar el debate es, también, hablar de la exigencia que hacemos al Gobierno de que informe sobre sus decisiones, abra un periodo para la discusión, contraste y valore otros modelos, consulte a la ciudadanía y, decida.

Ahí se enmarca la proposición a la que aludió en este diario en su artículo Antxon Olabe (ver 27 de julio). Nos agrada que, por lo menos, uno de los objetivos de nuestra iniciativa se empieza a cumplir: contribuir a socializar el debate.

¿Cuánta energía se necesita y para qué? Esa es la cuestión a plantear

Al margen de fomentar el debate inexistente hasta ahora, pretendíamos también volver a denunciar el retraso que el gobierno lleva en la elaboración de la nueva estrategia energética y urgirle a traerla cuanto antes. El señor Olabe nos acusó de "tocar de oído" en este tema, cuando intuimos que él mismo "tocó de oído" cuando citó el debate parlamentario. Quizás recogió lo sucedido mediante los medios de comunicación, cuando lo interesante y verdaderamente instructivo sería que todos los interesados leyéramos, en su transcripción, los debates íntegros y las enmiendas de cada partido.

A partir de ahí, se da por supuesto que los 20 minutos que tiene un grupo político para defender su postura limitan demasiado. Nuestra formación pretendía esbozar cuál es el modelo que reivindica sobre el modelo de desarrollo, con una premisa fundamental: no hay modelo energético (ni vigente ni alternativo) que pueda alimentar el actual modelo de desarrollo.

Conviene recordar que la actual estrategia energética en Euskadi 2000-2010, está caducada. Según el consejero de Industria, la correspondiente evaluación de la anterior y la nueva estrategia para el periodo 2010-2020 deberían haberse presentado en el primer trimestre de 2011. Seguimos esperando.

Aralar considera pertinentes aquella y otras iniciativas que compartan estos objetivos. Defenderemos que el diseño del modelo energético debe plantearse sobre otra cuestión: ¿cuánta energía se necesita y para qué? Debemos buscar un cambio en el modelo de consumo, producción, transporte, necesidades sociales reales y límites de la biosfera. Nuestra propuesta: abandono inmediato de la energía nuclear y abandono paulatino de las fósiles, acompañado de una apuesta real por las energías renovables; pero, como independentistas que somos, reivindicando la autodeterminación a la hora de tomar decisiones en la planificación, producción y distribución de la energía eléctrica.

Esta idea se opone al modelo centralista actual. Defendemos democratizar las decisiones y acercar la producción energética eléctrica al consumo, siendo fundamental utilizar las herramientas de planificación territorial, explorando soluciones de autoabastecimiento eléctrico sostenible para edificios, pabellones, polígonos con generación de energía renovable de pequeña escala.

Tratamos de no "tocar de oído" esta melodía; y sí que la misma llegue a oídos de la sociedad y de quienes diseñan el futuro de nuestro país. Ya nos gustaría que otros se atrevieran a hacer pública su partitura y poder debatir sobre la misma, algo que no ha ocurrido hasta ahora.

Dani Maeztu es parlamentario de Aralar