Rigau llena de dudas el calendario escolar
A menos de un mes del final del curso escolar ningún padre sabe cuándo terminarán las vacaciones de sus hijos. Tras proponer que el próximo año escolar empezara el 7 de septiembre, la consejera de Enseñanza, Irene Rigau, cambió ayer el discurso y señaló que las clases comenzarán "entre el 9 y el 15 de septiembre" para conseguir el "máximo consenso" entre la comunidad educativa.
La Federación Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Cataluña (Fapac) recordó que el calendario escolar suele estar cerrado ya en el mes de abril y lamentó la incertidumbre que supone para las familias, pendientes de cuadrar y conciliar sus vacaciones estivales con las de los niños. "Es cierto que parte del retraso se debe a que ha habido elecciones a la Generalitat, pero se está demorando más de lo deseable", señaló un portavoz de Fapac. Rigau se comprometió a concretar la fecha del inicio de curso el próximo 1 de junio para resolver "la urgencia de las familias".
Los sindicatos, por su parte, advierten de que el calendario escolar se convertirá en un guirigay debido a los siete días festivos de libre disposición que el departamento prevé conceder a cada centro en sustitución de la desaparecida Semana Blanca. "Será un caos total porque cada centro programará las fiestas según sus intereses", avisó Xavier Massó, del sindicato mayoritario en Secundaria, ASPEPC.
